Capítulo 20

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La semana de exámenes se hace presente y con ello los estudios intensivos. Pasaron todo el domingo estudiando para los primeros seis exámenes, todo con el fin de salir bien en los que más se les dificultan a ellos.

Y para ella es sencillo, por lo que es la primera en terminar el examen. Y se va al patio a pasar el tiempo, no tardó ni veinte minutos por lo que tiene el resto para hacer lo que quiera. Cada año hace los exámenes que les tocan en diferentes horarios, por lo que a excepción de los de tercero, todos tienen clase en esos momentos.

Se va a sentar a la zona verde a la que le gusta ir y se sienta bajo un árbol, saca su teléfono y le manda un mensaje a Kuroo, diciendo que terminó su primer examen y preguntando cómo le está yendo a él en clases. Desde hace unos días se ha estado comunicando más con él, porque esos días le estuvo avisando de cómo va el plan de Sasuke.

Pero después de hacer eso se queda dormida, perdiéndose la siguiente clase.

Y es hasta que Oikawa la busca porque no la encontró en su salón. Ya es la hora del almuerzo y le pareció extraño, porque ella siempre los espera. Así que se ofreció a buscarla.

—Saya-chan~—La mueve un poco para que despierte, pero solo se remueve un poco. Su cabello cae cubriendo casi por completo su cara, más de lo que de por si el mechón lo hace—. Saya-chan~—Repite la acción, pero no recibe respuesta más allá de un gruñido.

No entiende cómo puede dormirse tan fácilmente, el día que la conoció estaba durmiéndose. Si lo hiciera más a menudo le preocuparía mucho. Se sienta junto a ella y la abraza, acomodándola mejor para evitar que el dolor de cuello sea peor.

Tiene hambre, pero vaya que es difícil despertarla y no quiere ser brusco. Más que todo porque siente que lo primero que recibirá será un golpe.

Se inca frente a ella y empieza a puyarle la cara, insistente consiguiendo que se mueva para apartar lo que sea que la esté molestando. Pero sigue, el punto es despertarla sin ser rudo. Un rato después ella abre los ojos, y su mirada no es somnolienta ni por cerca. Está molesta.

—¡Es hora de almuerzo! ¡Debes comer, Saya-chan~!—Habla antes de que pueda decir algo, la toma de las manos y la ayuda a levantarse de un jalón. Aunque ella se suelta de forma brusca en cuanto está de pie, pero se tambalea por acabar de despertar y no ser ella sola la que se levantó.

Oikawa la agarra de los brazos y le sonríe con amabilidad, aunque solo recibe una mueca en respuesta, seguida de un bostezo.

—Ah...

—Camina.

Tooru hace un puchero, pretendía sugerirle algo, pero fue cortado sin más. Tampoco se ve de tan buen humor para insistirle. Pero cuando tropieza con una rama caída y casi se cae, decide cargarla. Aunque lo golpea en cuanto la eleva del suelo.

—¿Qué crees que haces?

—Te cargo—dice obvio con una sonrisa inocente—. Casi caes, no quiero que te lastimes.

Ella guarda silencio y se deja cargar, discutir no hará que la suelte. Aunque no puede evitar sentirse incomoda, sobre todo al ir subiendo al tercer piso del edificio donde reciben clases. Todas las chicas con las que se cruzan le dedican miradas de desprecio y furia, es claro que no les agrada nada que alguien les robe al castaño, como si este fuera de su propiedad.

Ya se imagina lo que viene, cartas amenazantes y cosas por el estilo. Infantiles. Ya lo vivió en Nekoma, por alguna razón Kuroo tiene un grupito de niñas locas por él, pero eso sí, no es tan grande como el que tiene Tooru. Y puede ser un problema, si le importara realmente.

—Si llego a encontrar algo indeseable en mi taquilla alguna mañana, te golpearé—avisa de forma neutral, recargando su cabeza en el pecho de él.

—¿Ah? ¿Por qué~?

—Será tu culpa, superestrella.

Saya frunce el ceño, pocas veces su boca desobedece a su cerebro y que mal que haya ocurrido en ese momento. Oikawa por su parte sonríe, encantado por la forma en como le dijo. Haya sido intencional o no, le ha gustado.




Pues  aquí está el 20, no es tan largo, pero espero les guste.

¿Qué les pareció? ¿Alguna opinión?

¡Gracias por leer!♥

Amor por el Deporte [Oikawa Tooru]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora