Tú siempre para mí | Naruhina

XXI.VERANO

XXI. VERANO.

Las vacaciones de verano habían iniciado, la temperatura había aumentado, muchas de las personas iban a la playa, era la temporada donde todos salían a disfrutar de las piscinas o del mar.

Naruto salía de visitar a sus padres, se dirigía hacía su departamento. Al llegar se dio una ducha rápida, se puso ropa comoda y fresca. Naruto aún seguia leyendo cosas acerca de la paternidad, quería estar preparado para cuando llegará el día y ya se estaba preparando para lo que se venía, pero aún así él siempre se preocupaba y leía todo lo que encontraba acerca del tema, para estar más seguros.

Últimamente él y Hinata no se habían visto mucho, al iniciar las vacaciones Hinata, su hermana y su padre habían ido a una casa de verano. En los fines de semana que podía iba a verla, era un viaje de 4 horas, pero no le importaba con solo estar a lado de su amada. Lo más importante para él era ella, su novia; Hinata Hyüga.

— Hola mi princesa ¿Qué estás haciendo?— comenzó hablar por el teléfono con ella.

— Hanabi fue a surfear hace un rato, estoy con mi papá comiendo frutas.

— Me alegra que estés comiendo bien.

— Para inicios de Agosto regresará papá me llevará con él y luego volverá acá, pero me quedaré yo allá, quiero pasar el mayor tiempo contigo — aquel comentario provocó una sonrisa en el rostro de Naruto.

— Me hace felíz, pero ¿Vas a estar sola en casa?

— Ehmm... eso... Yo quería preguntarte  si ¿Querías quedarte conmigo durante ese tiempo? — Naruto sabía que probablemente Hinata estaba roja como un tomate.

— Mmm... Claro que sí, mí amor. No quiero que te pase algo cuando estés sola.

— Gracias Naruto~kun.

— Te amo, nos vemos luego — colgó el celular. Estaba contento pronto vería a su princesa de nuevo.

Aún agosto no llegaba así que Naruto fue en uno de los fines de semana libres a verla. No podía estar tanto tiempo separado de ella.

Condujo su carro tardó 4 horas no había mucho tráfico ese día, llegó a las cuatro con treinta minutos, camino hasta la casa de Hinata, la pudo mirar que ella se encontraba en el balcón y sonrió.

— ¡Mi bella princesa! — gritó y ella al verlo sonrió y corrió de inmediato abrirle la puerta.

— Estás aquí — lo abrazó, aceptó aquél abrazo tan cálido de su amor.

— Sabes que necesito verte — acarició sus manos, ambos entraron a la casa entrelazando sus dedos.

— Naruto me alegro verte aquí.

— ¿Cómo está señor Hyüga? — sonrió.

— Yo estoy bien... ¿Por qué no salen a pasear?

— Claro, vamos Hina.

Fueron a dirección de las playas, aquel día el atardecer lucía sus brillantes colores rojizos.  Caminaron a las orillas del mar, siempre tomandos de las manos.

— Espero que nuestro pequeño se haya portado bien.

— Él lo ha hecho y te ha extrañado mucho.

— ¿Sólo él? — levantó una ceja.

— Y yo también — las rosadas mejillas de Hinata se notaban y él puso su mano en su mejilla y se acercó depositandole un beso en sus exquisitos labios, únicos y exóticos en el mundo. Un beso tierno y lleno de pasión, Naruto pasó su mano por debajo de la camisa de Hinata, tocando su vientre, que este empezó a moverse.

— Parece que alguien se emocionó — ambos rieron, Naruto miraba atento a las pequeñas pataditas de su bebé. Era hermoso ver sus movimientos, eso significaba que estaba vivo y que pronto estaría junto a ellos entre sus brazos.

Volvieron a entrelazar sus dedos y siguieron caminando descalzos sobre la calida arena de la playa. Se detuvieron en un puesto de helados, pidiendo uno para cada uno, buscaron un lugar para sentarse y ahí Hinata posó su cabeza sobre el hombro del rubio. 

Eran ya casi las siete de la noche, ya estaban partiendo hacía la casa. Al llegar Hanabi ya había llegado de surfear, aquel verano había mejorado un montón.

Al cenar todos como una família sonriendo y charlando. Al terminar de comer Naruto y Hinata fueron a una habitación, en la casa solo había cinco habitaciones uno lo utilizaban la sirvienta y el otro era mas un almacén de varias cosas. Así que Naruto dormía en la habitación de Hinata.

— Debes estar muy cansado.

— Algo... — Se acercó a su novia, pasando sus manos por su cintura quedándose como un abrazo. — En realidad si lo estoy — bostezó.

— Vamos tienes que dormir
— le dio un tierno beso.

Naruto se acostó y a su lado Hinata, tomó su mano.

— Me encanta tu presencia y cada vez que me tocas siento una estática recorrer mi cuerpo.

— Yo siento lo mismo.

Poco a poco se dejaron caer en brazos de morfeo.

(···)

Los rayos de luz atravesaban la gran ventana alumbrando la habitación. Naruto se estiró despertando poco a poco, miró a su derecha ahí su futura esposa durmiendo tranquila y pacíficamente, era su más bello ángel.

Naruto tendría que irse ese día, así que después del desayuno lo haría.

Las horas pasaron y ya casi era la hora en la que Naruto tenía que partir, siempre permanecían los dos juntos hasta el último momento.

Hiashi dijo que si Hinata quería podía regresar a casa en Konoha junto a Hinata, ella aceptó y los dos enamorados se encontraban empacando las cosas de Hinata, pero no había mucho ya que la maleta estaba casi intacta.

Hinata se despidió de su papá y hermana y se fue junto a Naruto, volverían a Konoha.

(···)

El viaje duro al rededor de 4 a 5 horas. Dejaron las maletas en la habitación de Hinata.

— Ya vuelvo tengo que hacer una llamada y voy a ver mis cosas—  se acercó a Hinata le dio un beso en su frente — Descansa.

Naruto partió hacía su departamento.

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¡Wolas mis queridos mininos!...FELIZ NAVIDAD, FELIZ DIA DE LOS INOCENTES que se salvaron que les hiciera una pequeña broma y FELIZ AÑO NUEVO les deseo que este año sea mejor que el anterior y este lleno de paz :3 Volví bebés YAAAAASS y les aviso que el próximo viernes 10 de enero en mi cumple, lo que significa que va a ver actualización de dos a tres capítulos de esta historia ese día :3 Yaaaas. Saben que los amo y me despido.

Alissvettz