los mismos tres se volvían a encontrar en el pasillo que daba con la sala de la investigación. todos se veían tranquilos respecto a lo que pasaba, parecían tener sus conciencias más que limpias, no parecían tener problema alguno.
—min yoongi. – el peli-gris miró al oficial y éste le hizo una seña para que avanzara.
caminó hasta la sala sin observar a los demás y tomó asiento frente al oficial. colocó uno de sus codos sobre la mesa y apoyó su cabeza en su mano, mirando de manera fija al señor que estaba frente a él.
—23 años, la misma edad del fallecido y era su mejor amigo. – leyó la hoja y lo observó. yoongi asintió lentamente y bostezó.
—todo eso es correcto. – el oficial asintió.
— ¿cuándo fue la última vez que vio al joven kim?
—hace nueve días, creo. no soy muy bueno con esto de la memoria, tengo lo que se conoce vulgarmente como mente de pollo.
—reláteme lo poco que se acuerde, joven min.
yoongi miró por quinta vez su reloj mientras seguía caminando a paso rápido hacia la cafetería que quedaba en el centro de gangnam-gu. había quedado ahí con jin para ponerse un poco al día, hace mucho que no se veían y, al parecer, les urgía un descanso a ambos.
miró por las afueras a cada persona que se encontraba dentro de la acogedora cafetería y diviso la cabellera teñida de su rubio amigo. entró en el no tan pequeño local y fue directo hacia jin, quien lo esperaba con dos tazas de café en la mesa.
—siento llegar tarde. – quitó su abrigo y lo colocó en el respaldar con su bufanda. juntó sus manos y las restregó para poder producir algo de calor en ellas, sólo hasta que el calor del lugar y lo caliente del café llenaran su cuerpo.
—estoy acostumbrado a cada uno de tus retrasos. – dijo y yoongi sonrió de lado antes de tomar un sorbo de su café y suspirar de satisfacción.
—¿cuánto?– preguntó jin y yoongi entendió al instante.
—dos semanas. – dijo y tomó otro sorbo.
jin sonrió. – vas logrando todo de a poco. te felicito.
yoongi volvió a sonreír. – ¿qué tal las cosas con el trabajo?
—mucho y mucho papeleo, aunque taehyung ayuda mucho con eso. me tiene algo preocupado. – restregó la palma de su mano en su barbilla y se llevó su taza a sus labios.
—¿y las cosas con namjoon?– jin dejó su taza de lado y jugó con sus manos por encima de la mesa.
—no sé, lo vi hace como una semana en el supermercado. estoy seguro de que era él, lo reconozco por muy lejos que esté.
yoongi comenzó a interesarse más en la conversación. – ¿qué pasó?
—pues... fue muy raro, ¿sabes?– el rubio rascó su nuca con algo de incomodidad. – lo escuché gritar y cuando se dio cuenta de que lo observaba salió corriendo antes de que pudiera acercarme.
—eso no es muy de namjoon. – yoongi ladeó la cabeza y suspiró. – ¿tú crees que...?
jin dejó las palabras de yoongi al aire. – probablemente sí pero no me he podido contactar con él, además ¿no sería algo muy raro que tu ex te escriba para esas cosas? digo... por algo él y yo terminamos y, sinceramente, no me quiero volver a involucrar en eso.
yoongi volvió a suspirar y dejó su café de lado para tomar la mano de su mejor amigo en forma de apoyo. – sé por todo lo que tuvieron que pasar y te lo vuelvo a decir, fue una completa mierda y no acabaron de la mejor manera pero... supongo que aún le puedes brindar apoyo.
jin removió su café con la pequeña cuchara que le habían dado. – supongo... veré si le escribo en estos días. – observó su reloj y abrió los ojos como platos. – me tengo que ir, yoongi. lo siento mucho.
yoongi asintió. – anda, no te preocupes. otro día nos reunimos, voy a pedir unos días libres.
jin asintió. tomó su saco, su abrigo y salió corriendo de la cafetería.
—¿a qué se refería con que ellos no habían terminado de la mejor manera?– el oficial rascó su barbilla y miró a yoongi con atención.
—usted ha de saber que namjoon se drogaba, ¿verdad?– el oficial asintió. – a jin no le gustaba nada de eso pero aceptaba a namjoon, con todo y sus defectos porque lo amaba y demasiado. pero, namjoon cruzó los limites y dejó descolocado a jin la primera vez que lo golpeó.
— ¿jin sufría de violencia por parte de su pareja?
—ocurria pocas veces, cuando namjoon estaba muy drogado. dos o tres veces llegué a presenciar esos estados en namjoon y era horrible ver como jin pasaba horas llorando por él o como a veces ocultaba algunos moretones. un día jin se cansó, namjoon se había excedido a tal punto que había hecho a jin sangrar. ese día pasé la noche al lado de jin porque namjoon se había ido del departamento que compartían.
el oficial asintió. – gracias por toda la información, joven min. lo llamaremos si necesitamos más información sobre la relación de ambos jóvenes.
n/a: ¡gracias por las +500 leídas! <3
¿podrían pasarse por el fanfic clue de Y00NGZ? estoy segura de que les va a gustar.
