»Narrador.
Era un día normal, común y corriente en la bella ciudad de Londres. Un clima ni tan nublado ni tan soleado, era un día perfecto para salir a caminar con amigos o solo, dar la vuelta a algún parque cercano y simplemente pasarla bien.
Las calles no estaban muy transitadas, tanto de autos como de personas. La mayoría estaba en sus casas, trabajos o escuelas, pues a penas era miércoles.
Aunque para otras personas, era más que un simple miércoles, en una pequeña casa justo al otro lado de Londres, se encontraba Harry Styles, un chico de 22 años que se preparaba para su primer día de trabajo en una biblioteca, sé que te estas preguntando, ¿qué hace un chico tan joven trabajando como bibliotecario? Bueno, pues Harry tenía una pasión por los libros y por escribir. Sentía una conexión muy especial con estos, cada pequeño párrafo de un libro era como vivir una nueva vida, aunque solo fuera por unos instantes.
Harry estaba frente al espejo de cuerpo completo que se encontraba en su habitación arreglando cada pequeño detalle de su persona, era su primer día y no quería quedar mal frente a Mike, su jefe. Cuando estuvo listo, tomó su portafolio con sus cosas y se puso en camino a la biblioteca. No estaba lejos, así que decidió dejar el auto en el garage e ir caminando.
En su trayecto, se detuvo frente a una tienda de electrodomésticos que tenía televisiones en sus aparadores, todas mostraban la imagen de un chico joven, rubio con unos enormes lentes oscuros en su rostro y un sombrero. A Harry le llamó la atención esto, ya que jamás en su vida había visto el rostro del chico, a pesar de que este tal vez era famoso.
»Niall Horan damas y caballeros, uno de los artistas nuevos mas jóvenes de la industria de la música esta aquí con nosotros. Dinos Niall, ¿Londres es todo lo que tu pensabas que sería?«
Harry aguardo a que la risa del chico se detuviera para escuchar lo que tenía que decir, miró su reloj y notó que aún tenía quince minutos de sobra, así que tal vez podía ver un poco mas de esta entrevista.
»Bueno James.. Creo que Londres es un lugar hermoso, muy pintoresco, aunque claro esta que no se compara con mi bella Irlanda.«
La risa del chico volvió a acaparar los altavoces del televisor, lo que hizo que Harry hiciera una mueca, era irlandés, así que por eso parecía ser extranjero.
»Es verdad, aunque dime Niall, ¿los ebrios hacen ver a Irlanda mucho más hermosa?«
Harry notó como el rubio fruncio el ceño, claramente ofendido, y después hablo.
»Creeme James, los ebrios de Irlanda tienen más clase y talento en su pulgar que los londinenses en todo su cuerpo. Si algún día me llego a topar con un londinense inteligente y con talento, ese día me tragaré todas mis palabras.«
Ahora Harry fue el que fruncio el ceño, ¿quién se creía ese chico para creerse superior a los londinenses? Solamente esperaba no encontrarse con ese chico jamás en su vida, pues seguro lo golpearía muy fuerte en el rostro y le diría "Repite eso de que los londinenses no tenemos talento". Inconscientemente sonrió para sí mismo y siguió con su camino hacía la biblioteca.
Al llegar, su jefe Mike aún no estaba ahí, y tampoco había una gran cantidad de gente, así que de su portafolio sacó una pequeña libreta y un bolígrafo para comenzar a escribir. Harry amaba componer pequeñas partes de canciones, que aunque a veces quedaban incompletas, tenían muchos sentimientos.
En su pequeña libreta se leía "Don't Let Me Go", una obra que había iniciado hace apenas una semana. Al estar solo se sintió con la libertad de cantar una pequeña parte de esta en voz alta.
»Now you're standing there right in front of me,
I hold on, it's getting harder to breathe,
All of a sudden these lights are blinding me,
I never noticed how bright they would be,
I saw in the corner there is a photograph,
No doubt in my mind it's a picture of you,
It lies there alone in its bed of broken glass,
This bed was never made for two..«Y hasta ahí quedaba su pequeño escrito, lo había hecho recordando a uno de sus viejos amores, una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro cuando pensó de que manera podía terminarlo, así que comenzó a escribir nuevamente, ignorando por completo que una persona detrás de las puertas de la biblioteca escuchó accidentalmente la angelical voz de nuestro chico rizado, y ahora todo lo que quería era esa preciosa letra dentro de su lista de canciones para sus conciertos.
ESTÁS LEYENDO
The Sun Inside of Me »N.S«
FanfictionDonde Niall Horan es un cantante famoso y Harry Styles es un simple bibliotecario que ama escribir canciones. -¿Crees que nuestros caminos fueron cruzados por obra del destino? -Yo no creo en el destino, yo creo en las coincidencias. ┌✿ R A N K I N...