¡VEN!

¡AHORA ERES MÍO!

Tras esa noche de locura Takaba estaba desconcertado y furioso pues Feilong a partir de ese momento comenzó a tomarlo cuando se le venia en gana.

NARRA ASAMI

Ya han pasado casi 20 días desde que mi querido fotógrafo me fue arrebatado y a pesar de pasar tanto tiempo por fin he llegado a Hon Kong para recuperarlo.

Aún no estoy totalmente preparado para enfrentarme a Feilong sin embargo no soportare perder más tiempo.

-Señor Yoh acaba de llegar, dijo mi asistente sacándome de mis pensamientos.

-Hazlo pasar tengo que hablar con el, contesté en tono de superioridad.

-Dígame señor, habló Yoh con la cabeza baja pues se sentía intimidado por mi mirada.

-Dime todo lo que ha ocurrido en estos días con Takaba, dije con mi voz fría pues quería saber lo que ha pasado con mi amado fotógrafo.

-Lamento informarle que Feilong ya lo ha tomado como su diversión, contestó con discreción el espía pues sabia que a Asami no le iba a agradar mucho la noticia.

-¡Hijo de puta!, respondí lleno de ira ya que no me gusta qué toquen las cosas de mi propiedad. - Voy por ti Feilong.

-¿Qué quiere que hagamos?, pregunto con un tono temeroso.

-Por el momento no hagan nada hasta que yo este recuperado para atacar, dije en tono serio. - Sin embargo quiero un informe cada noche.

-Esta bien señor, fue lo último que dijo el espía antes de retirarse rumbo a la mansión de Feilong.

Después de la reunión que Asami tuvo con Yoh, el pelinegro se puso como loco al saber que la persona más importante para el fue tomada por otra persona que no fuera él.

-Ven Takaba, dijo el Dragón cuando tuvo al fotógrafo con los ojos vendados a su merced.

-¿Qué quieres de mí?, respondió el menor al sentir que era atraído por Feilong hacia su cuerpo.

-Simplemente me quiero divertir, dijo el Dragón al momento de acercar al fotógrafo hasta su miembro erectil para que comenzará a lamerlo desde la base hasta la punta.

Takaba comenzó a besar y acariciar el miembro de Feilong haciendo qué este se estremeciera por el contacto, después de masturbarlo por unos minutos metió toda la hombría del Dragón a su boca jugando con el grande siendo agarrado del cabello controlado por Feilong sobre la velocidad de los movimientos.

Cuando el menor sintió el pre-semen salir de Feilong intensificó los movimientos hasta que esté se corrió en su boca, para después ser tomado con delicadeza por el Dragón y continuar con su rutina de cada noche.

-¡Dejame en paz!, gritaba cada vez que Feilong lo encerraba en una habitación a oscuras.

-Pronto te acostumbraras, le decía Feilong al fotógrafo cada ves que lo hacía suyo.

Así continuaron los siguientes tres días hasta que el Dragón recibió una llamada qué lo alarmó.

Llamada entrante?? :

-Espero que no me hayas olvidado, la voz a través del teléfono congeló totalmente a Feilong.

-¿¡Asami!?, no estabas....muerto, pregunto el Dragón sorprendido por escuchar a su enemigo al cual pensaba haber matado.

-¿Creíste qué te librería de mí tan fácilmente?, dijo el yakuza en tono sarcástico.

-¿Como lograste conseguir este número?, pregunto temeroso el Dragón pues se sentía amenazado.

-Eso no es de tu incumbencia. Sin embargo hay un tema que quiero tratar contigo, dijo en tono amenazador el pelinegro al cual Feilong quedo paralizado.

-Si hablas de lo que antes te solía pertenecer no tienes de que preocuparte yo cuidaré de él, contestó el Dragón con tono serio al pelinegro.

-Esperaba que dijera eso así que será mejor que te cuides la espalda ¡maldito!, fue lo último que dijo Asami antes de que la llamada se cortará dejando completamente desconcertado y preocupado a Feilong.

Fin de la llamada.

Al terminar la llamada el Dragón decidió irse de inmediato al verse amenazado por Asami, el cual estaba decidido a recuperar lo que era de su propiedad.

-Hagan qué el barco salga lo más pronto posible y tengan todas las cosas preparadas para irnos, dijo desesperado Feilong pues deseaba desaparecer.

-De acuerdo señor, respondió uno de sus subordinados al momento de hacer una reverencia para salir de la habitación y cumplir con los deseos de uno de su jefe.

NARRA TAKABA

Tras ver el rostro de Feilong al recibir la llamada, entendí que se trataba de mi amante él cual ya no tardaría mucho en venir por mi.

Sentí un gran alivio al saber que estaba con vida y una gran desesperación comenzó a llenar mi cabeza al querer salir de esa mansión y huir a los brazos de mi yakuza.

-Takaba, me dijo Feilong a lo cual yo correspondí con un tono de fastidia. - ¿Qué es lo que quieres?

-¿Quieres quedarte a mi lado?, me pregunto el Dragón logrando paralizarme debido a las palabras que acababa de escuchar.

-¡Claro que no!, respondí nervioso y agitado pues no quería perder a Asami.

-Entonces......, guardó silencio Feilong al momento de sentarse y ponerse a pensar en lo que haría. - Haré qué qué olvides de Asami y me quieras solamente a mi.

Asami mientras tanto era atendido y vendado por su asistente para ir de una ves por todas por su fotógrafo.

-Señor necesita usarlo, le recomendó su asistente al pelinegro extendiéndole un bastón.

-Mmmmmm, suspiro el yakuza al momento de tomar el bastón sin embargo lo regreso de inmediato a su asistente.

-No lo necesito, afirmó el pelinegro con su singular tono de superioridad.

- Será mejor ir tras Takaba y dejar de perder el tiempo en estupideces, fue lo último que dijo Asami cuando se encaminó a uno de sus autos.

¡NO TE DEJARE IR!