¿Sigue siendo la misma?

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-Genial he regresado después de un año en Japón, ¿Me extrañaste Corea? -La gente a mi lado me veía extrañada por hablar sola, pero eso no importaba, después de todo ya estaba en Corea de nuevo y todo lo que quería era verla de nuevo.-Oh~ Jessica, espero te encuentres bien y tengas mi respuesta, chica tonta y fría.-Camine con mi equipaje a un taxi cercano y me subí, después le di la dirección de mi casa, mejor dicho la de mis padres, pues había vendido mi departamento pues no tenía lógica dejarlo solo por un año, después de un recorrido de alrededor de una hora llegue a mi casa, baje del taxi el cual ya había pagado, tome mi poco equipaje y me pare en la puerta admirando mi hogar.-Hogar dulce hogar.-toque el timbre, para que a los pocos minutos se abriera la puerta encontrándome con mi madre, quien por cierto casi me deja sorda.

-!OH QUE SORPRESA YURI-AH¡-me dio un apretado cálido abrazo de bienvenida.-¡HIJA MIA QUE HACES AQUÍ, NO PENSE QUE REGRESARAN DESPUES DE TANTO!

 -Mamá calma y no fue mucho solo un año.

 -¡¿SOLO UN AÑO?! FUE UNA ETERNIDAD, ADEMAS DE QUE NO TENIAS NADA QUE HACER EN JAPON.

 -¿Nada?, mamá fui trabajar, hacer mi sueño realidad no fui solo a perder el tiempo, ¿Sabes?

 -Bueno discutiremos de cosas triviales después, entra.

Ella me soltó y me vio a los ojos dándome una sonrisa muy maternal, me ayudo con mi equipaje a pesar de que dije que no lo hiciera, madres; una vez en la sala y sentadas en los sofás con unas tazas de té caliente sobre la mesa de centro, entablamos conversación de nuevo.

-Bueno, aparte de cumplir tu sueño en Japón, ¿Qué más hiciste?

-Pues nada importante, básicamente me pasaba demasiado tiempo en mi trabajo.

-He ahí la razón de tus muy pocas llamadas, tenías a tú oma preocupada.

-Lo siento, pero ya estoy aquí, ¿Eso no te hace feliz?

-Más que nada en este mundo mi Yuri-ah.

-Bueno pues cuando tenía uno que otro tiempo libre, te llamaba o me iba a la costa a ver el mar, a los pescadores trabajar o el sol ocultarse, era lindo además que podía reflexionar, el silencio era apto para hacerlo.

-Lo sé, las costas de Japón son muy tranquilas.

Mi celular sonó y mi madre me hizo una señal para que contestara, puse el teléfono en mi oído y me levante hacia la cocina para poder hablar más tranquila con...

-¿YoonA?

-¡Ya! Yuri-ah, mala amiga, ¿Cuándo piensas venir a verme?, ni siquiera me avisaste que ya estabas en Corea, chica tonta.

-Tranquila, acabo de llegar hoy y pasaba por la casa de mis padres, recuerda que vendí mi departamento.

-La cual fue muy mala idea.

-Silencio, déjame terminar mi pequeña platica con mi madre con un necesito salir, extrañe tanto el centro de Corea por lo que nos vemos en la cafetería de siempre.

-¿Me pondrás primero que tú familia?

-Sí y no, lo hago porque es una excusa para ver a mi Ice Princess.

-Mala.

-Pero iras conmigo y hablaremos en el camino.

-Wow, que genial, tonta.

-No te enojes Yoong sabes lo mío con Sica.

-Esta bien solo porque eres mi mejor amiga.

-Te amo YoonA~

The time is over between you and me Donde viven las historias. Descúbrelo ahora