Un poco de la trama:
Después de toda una vida de ser amigas, Yuri le confiesa a Jessica que le gusta, pero la respuesta que le daría esta tendría que ser cuando regresara la morena de su viaje pues quería que lo pensara bien, pero Jessica no sabía...
-Entiende Yul, esos documentos y resultados son entre el paciente además de por supuesto yo, no puedo dar esa información por más que lo desees.
-¡Es mi novia!
-¡Y mi paciente! He amiga también y eso no cambia la situación, si lo quieres saber debes preguntarle tú misma.
-Pero me dice que está enferma y no me deja ir a verla, solo quiero saber que tiene para poder ayudarla de la manera que sea.
-Ahora si como amigas solo te puedo decir esto......no es grave, solo que lo que necesita es que seas fuerte y tú mente este abierta, sumamente abierta......no la juzgues, apóyala.-Palmeo mi hombro varias veces antes de irse por el pasillo, ¿Qué rayos? Pensé, suspire pesadamente y salí del lugar para ir a su casa.
A mis primeros dos golpes en la puerta me abrieron .
-Yul......-Me dijo mi hermana sorprendida por lo bajo.
-Soo...-Conteste yo de la misma manera, ella salió de la casa cerrando la puerta detrás.
-¿Qué haces aquí?
-Es la misma pregunto qué te hago.
-Jessica me llamó......
-¿Y porque no a mí?
-La situación es delicada Yuri, no te diré que pasa realmente porque es un asunto que ella debe aclarar contigo quiera o no, pero necesito que si tú estás dispuesta a también enfrentarla, sobre todo si la amas......apóyala.-Me repetía las mismas palabras que Taeyeon, ¿Qué era lo que tan grave pasaba que al parecer no era una enfermedad?
-Dije que no la dejaría pase lo que pase.-Mis palabras salieron en un tono serio y mis ojos delataban lo mismo...seriedad, por lo que ella después de mirarme unos segundos abrió la puerta en silencio y me invito a pasar con un gesto en su mano.
-Esta en su habitación.-Fue lo que me dijo antes de oír de nuevo el sonido de la puerta cerrándose.
-¿Es tan malo? ¿Por qué me sigues?
-Solo sigue caminando.-Mis piernas temblaban pero me preparaba para lo peor detrás de esa puerta del marco de su habitación, mis últimos pasos parecían ser más lentos de lo normal.
-Hola.-Dije susurrando ella me miro, estaba en el borde de la cama sentada, con unos papeles en sus manos y sus ojos hinchados, había una silla delante de mi niña donde antes lo más suponible estaba Soo, camine hasta ese lugar para sentarme.-¿Qué pasa? ¿Por qué ya no quieres verme?- le dije, ella me miro sus ojos relataban triste y un enorme miedo.-Estas últimas semanas han sido como morir congelada con lo frío de este mundo porque no estás ahí.-Se le escapo una leve sonrisa.-Mis mensajes, llamadas, señales de humo, te he hablado por todos los medios y solo me dejas en visto.-Se extendió mas la expresión en su rostro y con el dorso de mi mano limpie sus mejillas llenas de lágrimas, no dijo nada, me aparto y me dio los papeles en sus manos.
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