El Chico Mafias.

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Me espera un taxi y todo a la salida de la empresa, me lo pagan todo, me tienen entre algodones porque saben que sin mi imagen no conseguirán nada.

-hola buena tardes- me dice el taxista habriéndome la puerta de la parte de atrás- espero que haya tenido un buen día señor DiMarco.

- puedes tutearme, yo no soy como esos culos finos de ahí arriba.

- ha ostia, ya pensaba yo que te tendría que llamar Señor DiMarco todo el trayecto. Jajaja, ¿que mierda haces con traje Toni? No te pega nada.

- calla y conduce Sevas, haber si te voy a tener que inflar a collejas.

Sevas es colega mío, intento sacarse la carrera de abogado y acabado como taxista personal de los chupa pollas empresarios de LaCospedal.
Es un hijo de puta, me pegaba muy buenas fiestas con el, el cabrón no follaba ni pagando porque es feo de cojones... ¿Quien le iba a decir a él que se casaría y tendría dos hijos...?

- como cambian las cosas eh Toni, yo taxista y tú trabajando para los gordos....El mismo hijo puta que se dedicaba a dibujar en los exámenes que no consiguió el graduado ha acabado cobrando más de 8.000 pavos al mes más aparte los beneficios de la tienda que a saber cuánto es...

- no te lo pierdas Sevas tío, que al partir de ahora de 25.000 no me baja nadie.

Sevas en el fondo me envidiaba, toda la vida currandose la carrera y estudiando para acabar de taxista y yo tocándome los huevos a dos manos y ganando más que un empresario normal.
Pero era una envidia sana, el se alegraba también por mi.

- Sevas,sabes que cuando necesites la pasta me tienes aquí eh, no hace falta que me devuelvas luego nada ni ostias...

- Ya lo sé Toni tío, pero voy tirando, por ahora a mis hijos no les falta comida.

Entonces se hizo el silencio, hubo una temporada que Sevas estaba en las últimas, casi le quitan la casa y los niños, yo le preste el dinero y ahora están bien, pero a Sevas nunca le ha molado deber nada a nadie.

- hablando de los chiquillos,¿ como están? Hace mucho que no los veo, y a la paqui tampoco.

- están bien tío, son la ostia de cabrones, como el padre, a la paqui la vuelven loca. Haber cuando me das tu un ahijado. ¿ves? Eso no ha cambiado, tu sigues siendo el mismo puton de siempre Toni.

- y moriré siendo lo.

-bien, ya hemos llegado señorito DiMarco.

- no me llames así capullo... Dale recuerdos a la paqui... Y cuidate hermano.

-adiós Toni.