Capítulo 2: La aventura

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Stan:
Hoy quería resolver misterios con mi hermano y su amigo, que me sorprende porque nunca quiero buscar aventura desde que era niño y menos en un bosque que estos 30 años me parecía inútil.
Ford se veía igual de emocionado que yo y por un momento, sentí que éramos niños de nuevo, bueno somos niños pero era diferente, como si ya no tuviéramos problemas; por pura coincidencia, se me olvidó el nombre del pueblo en el que vivíamos por un segundo.
Relativity Falls.
Se susurró en mi cabeza. No tengo idea de qué están haciendo nuestros sobrinos en este momento, tenemos que volver a nuestra dimensión o si no, nos quedaremos aquí para siempre.
Mientras pensaba en esto una breve descripción interrumpió mis pensamientos:
Me llamo Stanley Pines y el niño de lentes que está a mi lado es mi hermano Stanford Pines, nuestros padres nos mandaron a Relativity Falls con nuestra tía abuela Mabel, hemos vivido muchas aventuras este verano, pero una de las más importantes fue la historia del tío Dipper y la tía Mabel cuando se pelearon, es increíble que por un pequeño problema se haya causado todo ese problema. Espero que mi hermano y yo siempre estemos juntos y no nos comportemos como torpes.
La voz se detuvo.
-¿...verdad Stan?- dijo Ford
-Sí- respondí distraído
Los dos niños me miraron confundidos.

Ford:
Stan está como siempre en otro mundo, pensando lo que quiere y nunca presta atención, es molesto.
De repente una vocecita inundó mi cabeza con su discurso.
Hola, me llamo Stanford Pines. Y el niño que tiene una camisa rayada es mi hermano Stan. Nuestros padres nos mandaron a este pueblo misterioso con la intención de tomar aire fresco, con nuestra tía abuela Mabel. Nuestro tío Dipper estuvo perdido entre dimensiones por 30 años, me gusta mucho resolver misterios con él, pero se me hace increíble que por una oportunidad de universidad se haya ocasionado todo. Bueno yo también me enojaría mucho si Stan arruinara mis sueños.
Paró.
Tengo que darme prisa, tenemos que volver a nuestra dimensión, o si no...
No recordaremos nada de nuestros sobrinos.

Bill:
Tienes que pedir un permiso especial para acechar sueños en otras dimensiones y más cuando son demonios como tú.
Con el permiso en mis manos, entré a la mente de yo en otra dimensión.
Era blanco.
Todo blanco.
-Que quieres- dijo mi versión alterna- conoces las reglas Bill. Muéstrame tu permiso o te llevaré a juicio multidimensional-
-Cálmate- interrumpí- aquí está mi permiso, a mí tampoco me gusta tener que estar pidiendo favores, pero tengo un problema y solo tú me puedes ayudar-
-¿De qué se trata?- preguntó él
-Verás, cometí un grave error,- proseguí- por accidente mandé a dos símbolos a tu dimensión y tú tienes que traerlos de vuelta-
- Bill- dijo el- no somos tontos y lo sabes, si quieres que cumpla con mi deber, vas a tener que darme algo a cambio-
¿En serio soy tan testarudo?
O este yo es más retorcido, es desesperante.
Pero tengo que pensar en algo.
-Que te parece si unimos lo que más queremos para tener más poder, sabes de lo que hablo-
Se quedó pensativo, intentando razonar mi propuesta.
-Bien- respondió- ¿a quien debo traerte?-
-Me alegra que aceptes- mencioné- quiero que traigas a Stanford y Stanley Pines, creo que son niños en este lugar ¿no?-
-Si- asintió- Seis Dedos es muy desconfiado y testarudo, va a ser difícil convencerlo, y ahora que sabe que está en otra dimensión, va a ser aún más desconfiado que de costumbre. Stan es más sencillo, es más confiado y curioso que su hermano, ya me las ingeniaré para lograrlo, pero de que te los traigo, los traigo-
-Bien- di un aplauso- entonces es un trato, debo ir a mi dimensión y preparar todo para la coalición de los mundos.-
El ya se había ido y abandoné el espacio blanco donde tuvimos la larga negociación.
Tengo que hacer unos cuantos negocios con estrella fugaz, es tan fácil de engañar que compartiré el mundo con mi otra versión en un abrir y cerrar de ojos.
Solo necesito que el cumpla con su parte del trato.

Perdidos en otro lugarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora