I Still Love You ©

~9~

Capítulo 9.

~ Es mí hijo.~

Pov Jamie

Toco la puerta con desesperación, maldita sea no abre y yo estoy más que desesperado.
Necesito saber que es mi hijo, si lo es quisiera poder saber el porque Andre simplemente no me conto nada, es horrible saber que perdiste tiempo valioso de estar con esa persona, me perdí  el embarazo, su nacimiento, sus primeras palabaras, todo... Y pensar que Klaus vio todo eso y consiguió que lo llamara papá, me molesta demasiado.

Escucho unos pasos apresurados llegar a la puerta y a una voz femenina gritar: "¡Voy!" y finalmente la puerta es abierta por Andre despeinada y en pijama.

— Dios, Jamie. ¿Qué diablos haces aquí?, ¿cómo sabes donde vivo?

La fulmine con la mirada.

— Teddy me trajo ayer aquí.

Ella me miró con intensidad y miedo. Tiene tanto temor de que descubra la verdad, pues lo siento, nena, lo sé todo y no estoy muy feliz con ello.

— T- Teddy. ¿Lo conoces?, ¿pero cómo?

— Pues creo que ayer se lo dejaste a mi secretaria.

Entre a la casa mirando lo que me rodeaba. Es una bonita casa, todo para la familia perfecta. ¡Ja!

— Necesitamos hablar urgentemente. Quiero toda la verdad.

Andre se puso realmente pálida, sé que sabe de lo que hablo. Asintio y me guió a la sala de estar. Muy acogedora por cierto. ¡Mierda! Me ofreció asiento y me sente en un pequeño sofá mientras ella se sento en un sillón frente a mi.

Después de unos minutos de silencio ella decidió que era el momento de hablar. Me prepare mentalmente para la verdad.

— Y- yo me embarace de Teddy a los 17 años de edad, me entere justo cuando mi novio y padre de mi hijo se fue a la universidad y termino conmigo. Un día decidí que era hora de decirle que estabamos esperando un hijo pero al momento de llamarle imaginate mi sorpresa cuando una chica me contesto...

Mierda, lo recuerdo, la chica solo era un polvo de una noche y contesto mi telefóno sin permiso. Desde ese momento apago mi telefóno y lo escondo cuando son mis noches de sexo.

>> Me enoje tanto porque, ¿oye? Se supone que acababamos de terminar, así que decidí no decirle nada sobre mi bebé y cuidarlo yo sola. Pero... Después llego Klaus y me ayudo tanto que quise que él formara parte de nustras vidas.

La miro con tristeza y resentimiento. A pesar de lo que paso yo tenía el derecho de saber que tenía un hijo.

—  ¡Tenía el derecho de saberlo! No por tu maldito enojo hacía mi le debías de privar el derecho a Teddy de conocer a su padre y a mi a mi hijo. Jamás te habría dado la espalda. Pero solo ves lo que quieres y lo que te conviene.

Me levante de golpe mientras ella se quedaba sentanda con la cabeza agachada y lagrimas corriendo por sus mejillas. Salgo de la sala y subo las escaleras con intención de buscar a Teddy. Necesito abrazarlo. ¡Dios!
Voy abriendo cada una de las puertas hasta que encontre una linda habitación decorada de súper heróes y a un pequeño niño dormido en su cama al final de la habitación. Cerre la puerta con extremo cuidado de no despertarlo y me acerque a su cama. Ese pequeño niño es mi hijo. Siento las lágrimas deslizarse por mis mejillas. Quiero ser el padre de ese niño. Quiero que me llame papá. Pero tal vez jamás se cumpla. Me acuesto a su lado, él se remueve y después me abraza acurrucandose. Poco a poco se va despertando hasta darse cuenta de que me esta abrazando.