I Still Love You ©

~12~

Capítulo 12.
~ Y no es de Jamie. ~

Pov Andre

—Necesitamos hablar — le dije a Klaus.

Hace exactamente cinco segundos  me hablo por teléfono diciendo y cito textualmente "¿dónde diablos estás?", lo único que se me ocurrio decir fue necesitamos hablar.

—Bien, nos vemos en casa— y
colgó.

Bien, es hora de afrontar las consecuencias de mis actos.

Bajo las escaleras y me voy directo a la sala donde se encuentran Jamie y Teddy jugando videojuegos.

—Teddy, me voy a casa, Klaus quiere hablar conmigo — al decir eso Jamie levanta la mirada de golpe y me ve con desesperación.

—¿Vas a ir tú sola?

Asiento.

—Es lo mejor, ¿no crees?

—Pero... — Teddy lo interrumpe.

—Esta bien, mami. Dile a mi papi que lo veré mañana — Jamie mira a Teddy con nostalgia y tristeza, sé que le entristece que su hijo no lo llame papi a él, pero lo primero que debo hacer es hablar con Klaus y debe ser a solas, sé que no soportara tener a Jamie ahí y menos saber que por él lo estoy abandonando.

—Jamie, ¿podemos hablar en la cocina, por favor?

Él asiente y me sigue a la cocina después de darle una última mirada a Teddy.

Cierro la puerta detrás de mi y lo miro, él está sentado en la barra de desayuno con la cabeza entre sus manos.

— Amor, sé que quieres que Ted te llame papi a ti. Pero entiende, Klaus es su papá, él que lo vio crecer. Es el único papá que él conoce y no...

Pero antes de poder terminar de hablar él me interrumpe.

— ¡Por tu maldita culpa! ¡Todo esto es gracias a ti! ¡Si no hubiera sido por tu maldito egoísmo, ahora Teddy me estaría llamando papá a mi! ¡Tenía el derecho de saber que iba a ser padre, joder, te hubiera ayudado en todo, todo! — cuando saco todas esas palabras de él me dí cuenta de que en verdad es lo que piensa de mi, que soy una bruja egoísta que sólo porque tuve celos de que otra chica contestara el teléfono, su teléfono, le quite el derecho de saber que iba a ser padre. Y maldita sea si no sé que tiene razón, pero me duele, no quería que me dijiera la verdad. Peferiria quedarme en la ignorancia a que me dijiera toda la verdad en mi cara.

— Lo sé, lo sé, ¿vale? Creeme que lo sé. Dios, ¡lo sé, joder, lo sé! Todo lo que me dices es la maldita verdad. ¡Soy una bruja egoísta! ¡Una maldita perra! Pero no es mi intención, yo sólo no supe que hacer, los malditos celos me ganaron y me nublaron la mente y llego Klaus y me dio un poco de esperanza, darle un padre a Teddy. Creí que tú no aceptarías a mi hijo... No supe que más hacer, que más... Dios...— en este punto ya estoy llorando a mares, pero no de tristeza sino de desesperación, por no saber como rayos explicar todo lo que siento, el porque hice lo que hice.

Jamie se baja de la barra de desayuno y se acerca a mi con paso lento, toma mi cara entre sus manos y limpia mis lágrimas con delicadeza; teniendolo tan cerca puedo notar que él también tiene lágrimas esparcidas por su cara, hago lo mismo que él y limpio su cara con mis dedos y le sonrió con sinceridad.