6

418 34 6
                                    

El chico de ojos miel me ato de pies y manos en una vieja silla.
Me puso un sucio trapo en la boca. Y simplemente se sentó en el taburete que se ubicaba frente a él, y se dedicó a mirarlo.
-Sabes, no me gusta hacer esto, pero.. Necesito el dinero- murmuró el ojimiel
Louis asintió sin ninguna otra opción, no podía hacer uno de sus típicos comentarios cargados de sarcasmo o ironía.
Se dedicó a mirar como el ojimiel iba quedando dormido frente a él.
Era un chico bastante joven, algo musculoso, unos tatuajes adornaban sus brazos fornidos.
Lucía una sudadera negra, un pasamontañas y un skinny jeans negro.
Se volteó para intentar mirar el lugar con más detenimiento.
Era un cuarto de lavado al parecer, lo indicaba el lavarropa y unas grandes cantidades de camisas y pantalones apilados de manera desordenada.
Localizó una puerta de color blanca, que seguramente daba a algún pasillo de la casa.
Vio unas ventanas, pero estaban herméticamente cerradas.
No creía que el chico viviera sólo, seguro lo tiene escondido.

¿Que pensaría su familia? ¿Estarian tristes?

Seguramente, eso fue una pregunta algo tonta, Louis.
Lo peor es que en unas semanas teníamos el campeonato de fútbol, había entrenado muy duro para eso.

Mi último recuerdo es ir caminando a una manzana de mi hogar, sentir un brusco empujón junto a un pañuelo en mi nariz, con un olor fuerte, que me hizo caer desmayado.

¿Por que a mi? Yo soy una buena persona, creo.
No robo. No mato. No violo.
No entiendo porque yo debo sufrir este calvario. Hice una mueca de disgusto.
El chico se removió, seguro estaba soñando. Rode los ojos.
Intenté retirar la mordaza de mi boca, pero me fue imposible.

--
Termine de peinar mis largos rizos y estoy conforme con el resultado. Tenía dos pequeños rodetitos en la cima de mi cabeza, sujetos con una banda elástica.
Le sonrei a mi reflejo en el espejo.
Hoy sería un gran día, tengo una entrevista de trabajo para una cafetería de mi ciudad. Se que no es la gran cosa, pero de algún lugar se empieza.

Con un pequeño puchero, desarme mi peinado, lo ate en una prolija colita y me puse un look algo informal para la situación, pero a mi parecer sirve.
Una camisa a cuadros roja, un skinny jean negro y zapatos elegantes.
Me rocíe mi colonia favorita, y algo de desodorante.

Hoy será un largo día.

~~
Mil disculpas por no actualizar, a modo de disculpa les traigo al inicio del cap. una pequeña parte narrada por Louis😱

No se si alguien siga leyendo esto. Pero mi plan es terminarlo.

Obsession / Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora