( adopta una mascota)

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( Raqui )
SI ESTÁS BUSCANDO UNA MASCOTA Y VES UN PERRO EN LA CALLE, DALE UNA OPORTUNIDAD.

Él entendía que lo estaba ayudando pero no podía dejar de quejarse por el dolor. Con lágrimas en los ojos atravesé todo el pueblo hasta que finalmente llegamos a casa. No teníamos dinero para pagar un veterinario, así que mi madre intentó desinfectar la herida por su cuenta, con un montón de remedios caseros que era muy joven para recordar. Mi madre logró que Raqui se tranquilizara y durmiera. Esa noche dormí junto a él para que no se sintiera solo; se quejó de dolor por un par de horas hasta que lógro quedarse dormido en mis brazos.
Con las semanas, Raqui fue recuperándose: el hoyo que atravesaba su pata poco a poco se estaba cerrando, empezó a caminar, luego a trotar y, ya al final, a correr como los viejos tiempos. Luego de meses, aquel incidente fue parte del pasado y parecía que nunca hubiese ocurrido; sólo quedó con un pequeño cojeo, pero nada que le impidiese correr por toda la playa con sus demás amigos. Raqui vivió feliz por muchos años hasta que finalmente la edad lo alcanzó. Mi perruno amigos se hizo viejito y decidió decirle adiós a este mundo, y estoy seguro de que lo hizo con una sonrisa.

Hola, Soy Germán GarmendiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora