Capitulo 7

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Sentimientos a Dúo

_ Narra Tomohisa desde el punto que escucho la voz de su esposa _

En todo el trayecto de regreso a casa, me puse a pensar por qué escuchaba a mi esposa después de su muerte, llegue a la conclusión de que estaba loco, pero lo supuse ya que hay muchos traumas que aún no pude superar, como por ejemplo la muerte de mis padres cuando apena tenía 8 años. Por eso solo me dije que no debería estar tan loco si la escuchaba, pase por muchos psicólogos y muchos de ellos me aclararon del funcionamiento del Subconsciente. Supongo que al extrañar su presencia, el subconsciente me hace imaginar que todavía puedo escuchar su hermosa voz. Su dulce y cálida voz.

Mientras continuaba el camino con la mirada baja recordando el pasado, terminé deteniéndome de golpe al ver algo moverse en uno de los arbustos de la zona, por la distancia trate de enfocar mi mirada al lugar y claramente por el movimiento imagine que era la cola de un gato, quien al parecer estaba casando o jugando, pero al acercarme lentamente para no espantarlo, termine en reírme al ver lo que era realmente. Una bolsa, una bolsa negra que al parecer el viento trajo de algún lado, termine en recogerle y encaminar a un contenedor cercano para dejarlo en el lugar agarrándolo con algún escombro para que no se moviera.

Al ver que el viento no se lo llevaría termine en continuar en mi camino, pero antes de eso... termine alzando un objeto que me llamo mucho la atención, notando que estaba en perfectas condiciones, no dude en ponerlo en el bolsillo de la camisa donde... acudía su foto.

Perdido de nuevo en mis pensamientos, termine llegando a casa. Al abrir la puerta y entrar, acudí en sacarme las zapatillas ya que no las aguantaba, en mi depresión no había calculado la distancia que me tomaría hacer de la casa de Sumiyoshi a la mía, pero bueno como sea con las zapatillas puesta al borde de la puerta, termine caminando a la cocina donde no dude en prender una de las hornallas y acercar mi mano al fuego, las tenía completamente congelada, al estar un momento calentando un poco mi cuerpo, apareció mi hermano del alma con unas bandeja.

−Tomohisa− acudió hablar sorprendido− ¿en qué momento has vuelto?−

−hace nada.− continúe refregando mis manos por los antebrazos− afuera está congelando ¿no lo crees? –

−he si... tuve que cerrar las ventanas. – noto que me mira detenidamente− ¿no tenías puesto un camperón?−

−ha... bueno...− sonreí tranquilo.

− ¡No me digas que te asaltaron!−

−No, para nada, se lo di a un muchacho−

− ¿un muchacho?−

−sí, no pude ver bien su rostro, pero supe que era de alma pura− me afirme de espalda a la cocina para que el calor me diera en la misma− él me salvó de que unos autos me chocaran, estaba tan perdido en mis pensamientos que nunca me di cuenta que estaba cruzando con el semáforo en Azul, así que como agradecimiento le di mi camperón ya que estaba muy desabrigado. Y como el viento quemaba, fue una buena decisión, aunque todavía me arrepiento de no acompañarlo hasta su casa.−

−no cambias, siempre das todo lo poco que tienes, pero dime− se afirma en la mesada del frente donde acudían los cajones− ¡¿Qué estuviste pensando?! Mira si te chocaban, ¿Qué iba a hacer con los gemelos? Sé que están molestos por lo que pasó, pero si te pasa algo, ellos....−

−Pero no pasó nada−

−Tomohisa...−

−esquivé la mirada− todo lo que pasó, me puso un poco mal, ¡¡Y NO!! No pensé en suicidarme, nunca aria algo tan trivial, pero en si... los problemas con los gemelos no fue mi desconcierto−

"EL AMOR NO SE OLVIDA" (PAUSADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora