Prólogo

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Estado De México.

Octubre, 1949

Magum permanecía sentado en el tronco a medio romper en aquel bosque cubierto de neblina, nublando la visibilidad a mas de un metro, se escuchaban diversos sonidos provenientes mas allá de su vista, en sus dedos sostiene una rama del mismo árbol, jugando con hormigas la mira fijamente hasta que la rama se prende en llamas. Mira de reojo y exhala una mueca burlona.

-Eres mas lento cada vez –dice sin dirigirse a nadie.

-¿Te diviertes? Vas en contra de tus principios. -la voz seca de aquel ser vestido de azul marino no altero a Magum.

-¿Por qué hemos venido aquí Ganda?

-Por algo que nos tiene consternados.

-A mi qué me puede preocupar a tal grado de ridiculizarse como tu.

-Quizás ahora no, somos nómadas de las tierras, pero llegara un día en el que las piernas ya no te respondan y tengas que detenerte a descansar para luego dormir.

-La muerte no me interesa.

-Se que no te importa no quedar ni en el cielo, ni el infierno, pero hay algo mas que si, tu legado.

-Tienes razón, he de admitir que no tengo un legado como tu con tu esposa Neve, pero mi amada murió y aun así mi corazón sigue latiendo por ella aunque a veces siento que murió junto con ella.

-Viejo amigo, triste sombra se de tu pesar pero mereces un legado que lleve tu sangre y la haga enorgullecer, por eso te he traído un regalo. -Chasquea los dedos, entre la neblina se forma una silueta borrosa, rompe el silencio y lo convierte en crujidos de ramas. Una mujer de piel morena y figura admirable aparece.

-¿Qué es esto?

-Ella es la futura madre de tus hijos, solo los tendrá y continuara lo que alguna vez comenzó.

-No puedo, ¡no puedo! Rompería promesas a mi Alni.

-¡Ella quería un legado! Romperías su mas amado deseo.

-Pero... -Se detiene a pensarlo, saca de un bolsillo un viejo reloj; una mujer de cabello rizado, ojos penetrantes y sonrisa encantadora se observa dentro del reloj. -acepto.

La neblina los comienza a cubrir, a lo lejos unas luces se hacen presentes, hombres se acercan gritando desesperadamente el mismo nombre.  

Un secreto másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora