Fly With Me

Capítulo 9

Nos sentamos junto a James y West. No entendía que hacía él aquí.
- Conozco a West desde que era un enano. Me ha insistido mucho en que te viera en los nacionales y entonces se me ha ocurrido que serias perfecta.
No me lo podía creer, West había hecho esto por mí.
- Bueno...has pensado la oferta.
- Sí Sr. Stuart.
Miré a todos.
- Mi sueño siempre ha sido los internacionales. Así que ahora mismo solo me centraré en eso.
- Muy bien. Te doy mi tarjeta, llámame si cambias de opinión.
Asentí. Tanto James como West se fueron.
Miré a mi madre.
- ¿Estás decepcionada?
- Pues claro que no. Estoy muy orgullosa de que persigas tus sueños.
- Gracias.
Necesitaba oír esas palabras.

Decidí ir a la pista de hielo para poder despejarme. Estaba segura de que había hecho bien eligiendo mi sueño. Pero después del campeonato ¿qué?
Oigo que hay alguien más aparte de mi.
Me giro y me encuentro con West.
- Hola.
- Hola.
- Me lo has puesto muy difícil.
- No creo. Me parece que sabes lo que quieres.
- No creo que estemos hablando de lo mismo.
- Charlotte, ¿me dejas darte un beso?
- En la mejilla, sí.
- Por supuesto. Solo quiero despedirme.
Sonrió y dejó que me bese en la cara. Luego hago lo mismo.
- Me entiendes, ¿verdad?
- Quieres a Aaron. Y no he conseguido enamorarte. No hay más que entender.
- Parece sencillo.
- Es sencillo.
- De verdad que me gusta estar contigo y te doy las gracias por todo lo que has hecho por mí. Pero estoy enamorada de Aaron. Eso no va a cambiar. Aunque ahora te quiero un poquito más que antes.
Los dos sonreímos.
- Creo que me iré una temporada.
- ¿Te marchas?
- Creo que es lo mejor.
- ¿Nos volveremos a ver?
- Por supuesto. Cuando vuelva.
Nos abrazamos. Por fin tenía las cosas claras. Aaron era, es y será el amor de mi vida.

Me dirigía a la estación de tren. Le había echado mucho de menos.
Por fin lo veo aparecer y me tiro literalmente sobre él. Después veo aparecer a Giselle, la cual también recibe un abrazo mío.
Dejamos a mi amiga en su casa y nos dirigíamos hacia mi casa.
- Te vi en tu entrevista.
- ¿Enserio?
- Sí, lo han colgado en Internet.
- ¿Y te ha gustado?
- Me ha encantado.
Sonreí.
- Eso no es lo único. James Stuart me ha propuesto ser patinadora profesional.
- ¿Y qué le has dicho?
- Que no. Mi sueño son los internacionales.
- Creo que te has equivocado. La carrera de una profesional es más larga que las de competición.
- Lo sé. Pero si acepto me tendré que ir de aquí.
Volvimos al silencio.
- Charlotte todo lo que tú decidas me parecerá bien.
- Gracias Aaron.
Le di un corto beso en los labios. Ahora estaba convencida de que había hecho bien escogiendo a Aaron.