Historia Hanny ⚡ (El Retorno)

capitulo 4. (promesa rota)

El curso había terminado.
El director había muerto llevándose con el a voldemort, dejándole a harry la única tarea de encontrar y destruir los horrocruxes para que el señor oscuro no pudiera volver a retomar su cuerpo.
Había compartido más momentos de intimidad con ginny, todo estaba relativamente tranquilo.

Iban en el tren camino a la estación, donde de ahí se dirigirían a la madriguera.
Harry, Ron, Hermione, Ginny, Luna y Neville iban en un compartimiento, comiendo golosinas.

Había un silencio incómodo, pues Harry y Ron eran los que normalmente iniciaban la conversación pero  Harry vencido por la culpa, se había distanciado un poco de Ron para así evitar mirarle a la cara.

-que harán este verano?.- pregunto neville, rompiendo el hielo- yo visitaré a unos parientes junto con la abuela.

-yo iré con mi padre a buscar cuernos de cola arrugada.-dijo luna, llena de emoción. - papá dice que hay diferentes especies.

-nosotros estaremos en la madriguera, Harry, Ginny y yo-comento Ron-  Hermione irá a Francia con sus padres.-  miro a la aludida con gesto triste.

-necesito pasar más tiempo con mis padres.- empezo a explicar Hermione- piensan que prefiero a la familia de Ron antes que a ellos.

-pues claro, mi familia es fantástica, a que si harry?.- dijo Ron tratando de aminorar la tensión.

- claro que si Ron, pero hermione tiene una familia también.- contestó Harry medio distraído ya que Ginny le enseñaba unas cosas por la ventana.

-tienen hambre?- pregunto Neville sacando un paquete de bocadillos de su mochila.

-yo si- Ron casi Salta de su asiento- que es?

-el elfo que me los dio dijo que eran bocadillos de pescado frito.- explico neville mientras los iba pasando.

Justo cuando harry estaba a punto de tomar uno, se escuchó el ruido de una arcada y Ginny salió corriendo del compartimiento.

-iré a ver si se encuentra bien- Luna salió detrás de ella.

-que extraño, a Ginny siempre le a gustado el pescado, saben si comió algo en mal estado?.- pregunto Ron con la boca llena.

-no que sepamos.-Contesto Hermione, pero Harry vio que su amiga tenía una expresión extraña en el rostro mientras miraba por donde Ginny había salido.

Una hora después luna regreso con Ginny​ sujetándola del brazo, esta última se veía pálida y algo inestable sobre sus pies, Harry ayudo a sentarla de nuevo junto a él.

-estas bien?.- pregunto Harry

-estoy mejor, gracias.- la voz de Ginny estaba temblorosa.
-podrías abrir la ventana Harry? necesito un poco de aire fresco.

Harry se apuro a hacer lo que le habían pedido.
40 minutos más tarde habían bajado del tren donde se despidieron de Hermione y se encontraron con los weasley.

Ya en la madriguera después de dejar sus cosas en sus respectivas habitaciones Ron se refirió a su madre.

-mamá, Ginny se sintió mal en el camino, parece que algo le cayó mal.

La aludida le lanzó una mala mirada.

- es verdad eso cariño?- pregunto la señora weasley con preocupación poniendo una mano sobre la frente de su hija.

- no es nada mamá, ya estoy mejor, simplemente el movimiento del tren me mareo.

-que raro, nunca te había pasado algo así, iré a hacerte un té de igual forma espera aqui- dijo mientras se encaminaba a la cocina.

Cuando se hubo perdido se vista Ginny miro a Ron con enojo.

-gracias Ron, ahora mamá estará preocupada.

El aludido solo se encogió de hombros.

Pasaron 3 semana y los weasley y Harry estaban en el comedor preparándose para desayunar, el olor a tocino inundó el aire e instantáneamente Ginny salto de su asiento y corrió hacia el baño con una mano sobre la boca.

La señora weasley hizo ademán de levantarse pero Harry la detuvo.

-no se preocupe, ya voy yo.
Así que se encaminó hacia el baño de donde salía el sonido de inconfundible arcadas.

-Ginny?. - pregunto mientras abría la puerta del baño

Ginny estaba inclinada sobre el váter pero logro articular un muy débil "vete harry" antes de que las arcadas volvieran a dominarla.

Pero harry no se fue, si no que se acercó a ella y sujeto su cabello hasta que estuvo mejor.
5 minutos después de que ginny se lavara los dientes, se encontraban en su recamara.
justo cuando Harry término de ayudarla a sentarse ginny rompió a llorar.

Harry se quedó sin saber que hacer ya que ginny no lloraba, menos de la forma en la que lo estaba haciendo, hipando y sollozando.

Unos segundos después reaccionó y de a poco se acercó a ella pasándole un brazo por los hombros, en cuanto lo hizo Ginny se aferró a él y empezó a decir su nombre una y otra vez en medio de los sollozos.
Eso fue más de lo que Harry podía soportar, estaba realmente asustado ahora.
Sacudió suavemente a Ginny.

-que pasa Ginny? Que sucede?

Pero Ginny se limitó a seguir susurrando el nombre de Harry una y otra vez, entre esas Harry creyó escuchar un "perdón Harry perdón"

-Ginny por favor dime que...- pero se interrumpió ya que Ginny había hablado.
Lo había hecho muy rápido y entrecortado así que Harry no entendió.

-como dices?. - pregunto con calma

Ginny respiro y dijo.

-Harry, tengo un retraso.
Y de nuevo empezó a llorar.

- un retraso?.- pregunto confundido, tardo un segundo en comprender, después las piezas encajaron, los mareos, las náuseas, los ascos por cosas que antes le gustaban, Harry sintió como si hubiera recibido un golpe en el estómago y palideció.

Tenía que ser una broma.