Primer Día De clases

Capítulo 2

Mary

Me di cuenta de que mi almohada estaba mojada y me asuste.

Aun la luz del sol pasa por mis cortinas... ¿Qué hora es?

Entreabro mis ojos y busco con desesperación mi celular entre las sabanas.

Siempre es lo mismo— gruño en mi mente— debo ser más ordenada.

La mirada adormitada pasaba por toda mi deliciosa cama, que por cierto es mi tentación después de comer.

Hasta que por fin lo encuentro.

Dibujo el patrón más fácil del mundo y mi celular se desbloquea.

Cuando veo la hora... los ojos casi se me salen. ¡Eran las 6:45 am!

¡Noo... Moriré! ¡Moriré!
¡Me quede dormida!

Ayer fue demasiado —pensé.

La playa, la comida y el baile había agotado mis fuerzas aquel domingo.

Simplemente cuando llegue a mi recámara caí de golpe y ni apague la luz.

Supongo que mi papá la apago.

Y hoy estaba con ganas de quedarme acurrucada ahí abrazando a mi almohada a quien llamaba por nombre Zac— en alguna parte de mi mente quería pensar que era Zac Efron.

Estaba un poco admirada (loca) por su físico increíble. Me encantaba verlo en High School Musical.

Odiaba a Gabriela, no quería que lo besaran ni que lo mirara toda coqueta.

—Jump— algún día lo conocería y me tomaría un foto con él.

Miré el póster que tenia en mi pared y
—Te quiero Zaaac — solté en un susurro.

Cuando llegó el terremoto...

—¡¡Mary, Mary, Mary, Mary!!

Entró a mi cuarto empujando la puerta entreabierta y saltando como un cangurito

—¿A que hora te vas a levantar?

—Aish, ya me levanté enano—Respondí de mala gana.

—Ahora... ushcale! ¡Voy a cambiarme que voy retrasada a clases!

—¡Pero Mary — ponía los ojos más tiernos que eh visto en mi vida— dijiste que hoy me llevarias al parque!

—Sii enano, recuerdo muy bien lo que te prometí. Y sera por la tarde que nos divertiremos..¡mucho!

—¡Eres la mejor hermana del mundo!— exclamó entusiasmado por nuestro paseo próximo.

—Ahora... Me dejas cambiarme porfavor, Mark? — Pregunté con ternura.

—Ship... Ya me voy, que te vaya bien en tu escuela, hoy llegarás tarde— Concluyó saliendo de un salto de mi habitación.

Me sorprendía como aveces mi hermanito podía mostrar una pista de sarcasmo en el momento más preciso.

Nose de quien lo aprendió— si claro... Bueno esta bien, quizás le di unas clasesitas, I'm guilty.

...

Fui tan veloz que me encontraba cambiada y peinada en 12 minutos.

Ni yo lo creia.
Era toda una combinación de adrenalina y entusiasmo.

Mi mamá se había quedado dormida y solo yo estaba en la cocina.

En el refrigerador habían wafles del día anterior en la mañana y me los desayune con miel y un vaso de yogurt. Todo en 1 minuto.

La hora me ganaba y parecía que no alcanzaría el autobús. Pero felizmente logre alcanzarlo.

Al subir encontré a mi mejor amiga Liz y me senté a su lado. Lucía tan bien arreglada y su perfume era delicioso.

—¡¡Amiga!! ¡Cuanto tiempo sin vernos! — Grito emocionadisima.

Reí por su reacción tan pinky y respondí: ¡Jump!, te dije que me extrañarías, ¡eso te pasa por irte sin mi!— Se fue a España y no me llevo!, pueden creerlo?— pensé divertida.

Sabes que si te hubiese llevado!, pero ya sabes fui con mis padres y mis hermanos, y no sería fácil cuidar a una ¡niña! más— alargó un poco la "s" en son de burla.

Reímos juntas y empezamos a contar lo que hicimos en verano hasta terminar el viaje a la escuela.

En el salon, me ubique en la silla delantera con Liz, para ver mejor al pizarrón.

Ya necesitaba un par de lentes, aunque la verdad, no era mi estilo.

Eso quedaba para Liz... pelirroja con pecas las mejillas y de metro y medio.

Yo me sentía... un nerd con ellos.

No importa lo ciega que esté, si el amor es ciego, y a pesar de eso tan popular... ¿No lo puedo ser yo también?