La habitacion

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Narra Blaine

El tiempo después del baile no había sido mucho, pero aún así los días ya habían transcurrido, ahora mismo me encontraba en la habitación de Kurt, mientras el hablaba y caminaba por toda la habitación y yo fingía escucharlo, de vez en cuando asentaba con la cabeza.

— ¿Me estas escuchando?-pregunto con los ojos entrecerrado y las manos en la cintura como una taza

— Te escucho, solo que me marea que des tantas vueltas-dije sentándome bien en la cama

— Y si me escuchabas, ¿de que estaba hablando?

Literalmente mi mente se puso en blanco, no se me ocurría de que podría estar hablando.

— De algo tremendo-dije con los ojos en blanco

— Te amo-dijo acercándose a mi y acariciando mis mejilla.-Últimamente estás muy despistado, ¿estas bien?-pregunto frunciendo el ceño

— Cuando venía para acá, mi madre me dijo que conoció un hombre, que le gusta mucho, y que eso era serio

— ¿Y qué tiene?-preguntó Kurt confundido

— No dejare que le rompan el corazón a mi mama, ese tal señor no me da buena espina

— Tu mama ya esta grande, no necesita que su hijo celoso la cuide de un hombre, además conozco a tu mama y no dejará que ningún hombre la lastime, Blaine.. ni siquiera lo conoces

— Aun así, no me agrada, aun no está lista para tener una relación

— ¿Quieres a tu mama?

— ¿Quien no quiere a su mama?

— Te pregunte algo y me respondes con otra pregunta-bufo Kurt

— La quiero, la quiero mucho

— Entonces deja que sea feliz a su manera, si ese tal ''hombre'' la quiere y la hace feliz, deberías estar feliz, hazlo por ella

Ahora yo fui el que soltó el bufido.

— Eres muy listo, y guapo-dije jalándolo hacia ami para besarle

— Son unas de tantas cualidades que tengo, ya deberías saberlo-bromeo correspondiendo a mi beso

Jale a Kurt del cuello de su camisa hacia la cama recostando le mientras yo me subía encima de el sin dejar de besarnos, posee mi mano en su nuca y el mi cintura, los besos se intensificaban entre los dos, en parte me agradaba poder hacer esto y en otra me aterraba incomodarlo, una sensación de nervios recorrió todo mi cuerpo, quien dijo que la mente era muy poderosa tenia razón, me aleje un poco para no incomodarlo pero el me volvió a acercar hacia su cuerpo, esta vez no me separe por mis pensamientos, me separe por el ruido de la puerta abrirse haciéndome caer al suelo.

Era el padre de Kurt boquiabierto, genial, alguien mas se nos quería unir, no lo se, la esposa de Burt?

— Tocar no es solo una sugerencia-dijo Kurt molesto por la forma en la que entró su papa

— Creo que mejor me voy-dije levantándome del piso

— Los dos, abajo, ahora-dijo apuntándonos con el dedo

Nos dio una última mirada y salió azotando la puerta.

— Creo que no se enojó-solté

— Prepárate para ser regañado por el señor Burt Hummel-dijo rodando los ojos

Bajamos las escaleras sin decir ninguna palabra y nos sentamos en los sillones que se encontraban en la sala. Su papá apareció y se sentó enfrente de nosotros mirándonos con los ojos entrecerrados.

Me enamoréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora