Me enamoré

Fogata

Narra Kurt

No hace menos de tres años estoy en esta preparatoria y jamas pensé que mi tiempo aquí terminaría de esta manera, con estas personas, al principio solo era un chico que solía ser muy solitario, y probablemente siga siéndolo, pero ahora que puedo observarme me he dado cuenta que no estoy solo, estoy rodeado de personas a las que amo, y si, entre ellos Blaine se encuentra, parece como si hubiese sido ayer cuando conocí a ese moreno de ojos claros, parece como si hubiese sido ayer cuando Blaine dudaba de su sexualidad, cuando Sebastian estaba tras el, cuando Tina iba tras el, y Rachel, cuando tuvimos nuestra primera cita, incluso cuando nos detuvo la policía, la navidad que pasamos juntos, el año nuevo, ese viaje a Michigan, cuando nos tatuamos que eso básicamente fue hace unas semanas, cada pelea, que vaya que han sido demasiadas.

— Me siento como un juez en la corte-hablo Blaine alzando su toga

— Vaya, me siento extraño-murmure 

— ¿Por que Blaine trae puesta la túnica?-pregunto Rachel-la graduación es en una semana no me hagas recordar mi tristeza, me siento algo seca de lagrimas-hablo

— ¡Se llama toga! me la pruebo, ¿se ve bien?-pregunto Blaine acomodándose el birrete

— Luces fenomenal con tu túnica-reí

— ¡Es una toga!-chillo Blaine

— ¿Ya llego tu túnica?-hablo Sam entrando al salón del coro

— ¿Por que Blaine trajo la túnica?-hablo Santana

Blaine suspiro por la falta de sentido común de los demás y se la quita con cuidado

— ¡Blaine quítate la bata, de acuerdo chicos todos sentados!-hablo el señor Schue-como ustedes saben, solo les queda una semana de escuela y si se preguntaran por alguna tarea, no la habrá, quien quiera cantar una canción es totalmente bienvenido, y Rachel espera déjame terminar-hablo al ver que la judía alzo la mano-solo quiero decirles que disfruten sus últimos días, es algo que van a recordar por siempre, el club es algo que recordaran, y yo también, disfruten cada clase, cada ultimo examen, cada tarea, cada canción, cada minuto con sus compañeros, por que tendrán que dejarlo para comenzar algo nuevo, enserio los extrañare chicos, lo único que tengo por decir es, hicieron de mi vida algo increíble.

— ¡No siga señor Schue que voy a llorar!-chillo Rachel

Todos nos levantamos y le dimos un abrazo al señor Schue. Gracias Señor Schue, por ser el mejor maestro que he tenido.

— Nosotros también lo amamos señor Schue-hablo Quinn

— Si, es genial, y mas cuando rapea-hablo Puck

El señor Schue rió y camino hacia su oficina para seguir trabajando.

— ¿Ya empacaste?-pregunte acomodando mi maletín sobre mi hombro, estaba bastante pesado

— ¿Para lo de la playa?-pregunto-¿te ayudo con eso?

— Si, nos quedaremos a dormir lo cual creo que es una locura espero que no haya mapaches-alce las cejas-no, estoy bien, traigo todos mis libros los entregare a biblioteca

— ¿Si te dejaron ir?-pregunto

— Mi papa aun tiene dudas pero estoy así de convencerlo al cien por ciento-reí

Mi celular comenzó a sonar y lo busque rápidamente en mis bolsillos, estuve así de soltar el maletín.

— ¿Hola? ¡papa!-chille

— ¿Quieres que te ayude con tus libros?-pregunto Blaine quitándome el maletín

Asentí con la cabeza y saque mis libros para entregárselos.