La vida secreta de un nefilim

5. Asia

-¡Porque no me dijiste nada sobre el viaje! ¡Soy tu guardián, debo protegerte!-dijo Luke todo enfadado. Se acaba de enterar de que Steve me había propuesto ir de viaje para averiguar cosas sobre mis padres.

-Mira, creo que no te debo ninguna explicación. Además, si te hubiese preguntado si me dejabas, me hubieras dicho que no -conteste.

-Lia, sí que te dejo, no soy nadie para decirte que no, pero debes de comprender que me lo tienes que decir antes de irnos, no que me tenga que enterar por Justin-dijo más relajado.

-Lo tendré en cuenta Luke. ¿Me puedes ayudar a hacer la maleta?-

-Hey, yo no soy el hace maletas-dijo soltando una carcajada.

-Entonces ayúdame a subir cosas-

-Vale... ¡pero solo esta vez!-

-Ya veremos, ya veremos-dije corriendo. Él empezó a correr detrás de mí. Parecíamos niños pequeños. Luke era más rápido así que me cogió y me sujeto y yo empecé a patalear.

-Suélteme, señor lobo-dije. A Luke se le fue la sonrisa y me dejo en el suelo.

-Tenemos que hacer muchas cosas-dijo todo serio.

-Luke... no era mi intención llamarte así-dije acelerando el paso.

-Tranquila, no eres tú sino que no me acostumbro a...-

-No te preocupes. Algún día te acostumbraras-dije poniendo una mano en su hombro-Si no es hoy será mañana-

-¿Y si no lo superó nunca?-

-Seguro que lo superas-dije haciendo una sonrisa.

-¡Oh! La Lia positiva apareció?-Luke exageraba su cara de sorpresa-Subamos tus cosas y hagamos la maleta, ¿okey?-

-Pensé que no me ibas a ayudar-

-Cambie de idea. Ve rápido antes de que me arrepienta-

Subimos todas mis cosas y empezamos a hacer la maleta. A Luke le deje una pequeña maleta negra que había encontrado. Él iba haciendo su maleta y, de vez en cuando, me ayudaba. Tardamos menos de lo que pensamos, así que empezamos a dar un paseo por el Instituto.

-...Y así supe lo de Emily-

-Pensé que nunca te podría decir que era tu guardián, que nunca sabrías que era un hombre lobo, que...-pero lo interrumpí.

-Pero ya ves que no, ahora lo sé casi todo-

-Lia, oye me gustaría decirte una...-Luke fue interrumpido por Jessie que se estampó contra la pared de enfrente y detrás de ella Jaime. Nos giramos inmediatamente y allí estaba Tina con los ojos totalmente negros.

-¡Corre!-chilló Luke. Hizo un paso adelante y empezó a transformarse. Su camiseta se rompió y su cuerpo se lleno de pelo. Yo corrí hacia James y Jessie.

-¿Estáis bien?-dije

-Yo sí pero él no-dijo la chica señalando a Jaime.

-Dame una arma yo os cubro-sin pensarlo dos veces me dio el arma y Jessie cogió a Jaime por el hombro. Yo los seguí hasta la siguiente esquina.

-¡Voy ayudar a Luke!-salí corriendo sin dejar oportunidad de contestar a Jessie. Cuando llegue, Tina ya estaba retorciéndose y Luke ya estaba volviendo a la normalidad. Aún tenía bastante pelo y las largas uñas. Estaba sentado mirando a Tina. Corrí a abrazarlo. Tenía la respiración rápida pero él me devolvió el abrazo.

-Te dije que corrieras-me dijo.

-No puedo dejar tirado a un amigo-dije sonriendo-Vamos que creo que necesitarás una nueva camisa. Y tal vez unos pantalones nuevos también, estos te van muy grandes-

-Ya puedo ir solo, tranquila-dijo levantándose.

-Estaré en la biblioteca si me buscas-

-Okey-

Abrí la puerta de la biblioteca y entre empecé a buscar entre libros y allí estaba. El libro de las runas. Empecé a ojearlo. La mitad me sonaban, la otra no tenía ni idea. Me senté en una silla y me prepararé un té. Iba bebiendo poco a poco y cada vez tenía más sueño hasta que caí dormida.

******

Me desperté atada con unas cadenas de plata en mis muñecas. La cabeza me dolía e intente ponerme de pie pero no puede. No podía aguantar mi propio peso. Tampoco podía levantar la cabeza porque si no me dolía. Se abrió la puerta.

-Muy bien, Eustaquia. Ya me quedo yo con ella-dijo una voz masculina.

-Lo que usted diga, señor-dijo Eustaquia.

-Esta es la hija de los Odair. Me la imagine con más ganas de matarme-

-No sé quién es usted-dije entre dientes.

-Lo siento no me he presentado soy Asia, Asia Vulturi-levante la cabeza e ignore el dolor.

-¿Y qué quiere de mi? ¿Venganza? Porque eso está pasado de moda-

-Que afilada tienes la lengua, niña. Veo que no te han contado la historia aún, pregunta por el nombre de tus padres... Oh... Espera... Estas atrapada aquí, no lo puedes preguntar, pobre niña-dijo saliendo por la puerta.

-¡Ven cobarde! ¡Lucha!-chille todo lo que pude. Empecé a llorar, quería que me sacaran de aquí, ver a otra vez a Luke, a Emily, a mi tía, a mis padres...

"Lia"

-¿Quién me llama?-

"Lia, soy Magnus"

-¿Magnus?-

"No hables, solo escúchame, te estamos buscando, pero no podemos. Así que tienes que pesar en alguien de nosotros." Empecé a pensar en Emily, pero no sé porque acabé pensando en Luke. Supongo porque es mi protector y eso lo relacionaba con salir de aquí.