Día 1.

750 32 5
                                    

Día 1.

Como cada mañana me levanté temprano y salí a correr. Correr me ayudaba a despejar mi mente y hacer que dejara de pensar en mis problemas, en mis ralladas, en Claudia...

Pasados unos 30 minutos llegué a mi casa y subí arriba para ducharme. Cuando estaba a punto de meterme en la ducha escuché el sonido que hace cuando me llega un WhatsApp pero decidí ducharme primero y después ya miraría el mensaje.

Cuando acabé de ducharme me sequé, envolví una toalla alrededor de mi cintura y fui a mi habitación. Al entrar me senté en la cama y miré el móvil, encontrándome con un mensaje de Claudia.

<¿Podemos vernos cuando nuestros hermanos salgan del instituto? Ahí mismo, en la puerta del instituto a las 16. Te estaré esperando>.

Era cierto nuestros hermanos iban al mismo instituto y de hecho ambos se llevaban genial. Tanto Cristian -el hermano de Claudia y mi ex cuñado -como Nacho -mi hermano -siempre se habían llevado bien pero no fue hasta que Claudia y yo estuvimos juntos que no se hicieron amigos de verdad. Ambos ahora eran uña y carne y era por eso que muchas veces me encontraba a Cristian en mi casa jugando a la play con mi hermano o haciendo el idiota.

Volví a mirar el mensaje y pensé en ir o no a la "quedada" con Claudia. No quería que ella jugara conmigo, no otra vez. Ella me había engañado en su día y no quería que lo volviera a hacer pero por otra parte quería ver si las palabras que había dicho el día anterior eran ciertas o no.

Mi hermano ahora mismo estaba en el instituto y seguramente junto a su "amiguita" Mayka o sino con Cristian y su grupo de amigos.

Lo que verdaderamente me creaba curiosidad era qué estaría haciendo ahora Claudia y porqué quería quedar precisamente en aquél lugar. ¿Por qué delante del instituto? No entendía absolutamente nada.

El tono de llamada de mi móvil me sacó de mis pensamientos. La pantalla de mi móvil estaba encendida y el identificador de la pantalla indicaba que llamaba Paloma. Paloma era una chica que conocía desde hace años y llevaba mucho tiempo detrás de mí pero yo en ese tiempo estaba siempre con Claudia y estaba enamorado ya de ella por lo que jamás me había fijado en Paloma.

Todo cambió cuando dejé a Claudia. Paloma apareció y, como yo estaba despechado porque Claudia se había besado con otro, me acosté con ella. Desde entonces habíamos sido algo así "follamigos". Éramos dos personas que se atraían y que se acostaban sin ningún tipo de compromiso. Ella podía estar con todos los chicos que quisiera al igual que yo podría estar con las chicas que a mi me apeteciera.

-¿Si? -contesté al teléfono.

-Hola guapo ¿nos vemos esta tarde? -preguntó ella con una voz seductora. Paloma era una chica muy atractiva pero nada que ver con Claudia. Claudia era simplemente perfecta, para mi desgracia.

-No puedo, Paloma. Esta tarde he quedado con Claudia -contesté serio. Iría aunque aún no estaba muy seguro. O no. Aún no lo sé.

-¿Con Claudia? ¿Y eso? -preguntó claramente sorprendida. -¿Habéis vuelto? ¡Al fin! -exclamó seguramente sonriendo.

Paloma siempre me decía que yo aún seguía enamorado de Claudia pero que todavía no lo aceptaba del todo, que tarde o temprano acabaría volviendo con ella. Yo simplemente le decía que estaba loca y que yo odiaba a Claudia por lo que me había hecho.

-No, Paloma. No he vuelto con ella. Simplemente me ha pedido que le de una semana para que vea que ella todavía me seguía queriendo.

-Ella te quiere, Adri. Te quiere mucho -me dijo ella. Ella pese a que le he gustado durante muchos años, siempre se había mantenido al margen porque sabía que con mi ex era feliz pero una vez se enteró que lo habíamos dejado había intentado algo conmigo pero ella sabía perfectamente que conmigo no podía tener algo serio porque no la quería. Simplemente me atraía.

Te doy diez días (1.5 Diez días)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora