Capitulo 39

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—lo que paso fue que, sí, ya no quería que James me siguiera buscando no quería que me viera con Ricardo, lo detestaba me sentía tan culpable de no poder hacer nada...

— fue mucho peor James le dolió mucho lo que dijiste- me interrumpió para hacerme sentir mal

—lo sé, pero era la única forma de hacerlo entender Ricardo me dijo que si James se acercaba él y mi familia las pagaría. Todo absolutamente todo era una gran mentira yo a el lo sigo amando, mi amor hacia el siempre fue- intente aguantar las lagrimas pero era imposible me sentía tan bien y mal al hablar de eso— fue verdadero

—ni siquiera le hablaste de tu boda— dijo seco

—no quiera que me hiciera cambiar de opinión y me llevara con el y me alejara de todo, mi familia también estaba

—¿si te amenazo?— soltó la pregunta

—¿Ricardo?— el asintió con la cabeza— siempre lo hizo, cuando llegamos a Alemania, intento abusar de mi, ya que le dije que nunca me acostaría con el que podria tener las amantes que quisiera pero nunca iba a estar en un cama con el. No soporte más y me fui de la casa todo el mes me la pase en un hotel y hasta ahora no lo he visto

—¿el hizo eso?— sus ojos podia ver que estaba sorprendido

— sí

—¿sabes que lo puedes demandar por eso?

— lo sé, estamos en eso, mi hermano levanto todo, porque aparte también lo estamos culpando de asesinato

—¿por qué?

—hace como seis, siete años, conocí a un chico llamado Javier el era una persona maravillosa quería intentar algo conmigo y yo acepte ya me había resignado de volver encontrar a James, bueno, cuando Ricardo de entero, el corto los frenos del carro en donde íbamos por suerte yo me salve pero el no

— dios, ese hombre esta loco

— lo sé, lamentablemente sus padres son una personas de un corazón noble y bueno y tiene como hijo a alguien así

—¿le has dicho algo?

— no, no les he dicho nada, pero saben como es el

—entiendo

— ahora tu, cuéntame lo de su compromiso con Silvia y su bebé— al decir eso le costo tanto trabajo, era como apuñalarme a mi misma

—cuando te vio en tus oficinas se la paso bebiendo, Silvia se aprovechaba de que esta borracho, me di cuenta al día siguiente, Silvia a estado enamorada de el desde que llego a las oficinas, nunca le he caído bien y ella a mi, no le dije a James porque va a pensar que estoy exagerando pero — se acerco más a mi como que si me fuera decir el más grande secreto— creo que Silvia planeo embarazarse de el

— al fin alguien me entiende— me recargue en la silla

—¿perdón?

—sí, a mi tampoco me callo bien esa chica, cuando supo lo de mi relación con James solo me miraba como si fuera algo no sé, repugnante

—sí, al parecer no tiene corazón— yo reí por eso

—bueno, ¿entonces crees que solo es un gancho para quedarse con el?

—así es, James se esta volviendo loco desde que te fuiste, quiere olvidarte pero es imposible olvidar a una mujer como tu, te aseguro que si mi amigo no estuviera tan enamorado de ti, juro que me quedo contigo— yo solté una gran carcajada— pero eres de mi amigo y lo respeto, bueno, esta tan obsesionado con olvidarte que se quiere casar con ella, piensa que se enamorara de ella y te olvidara

—ohh— metí a la boca el último trago de mi café

—pero no lo hará, me haré cargo de meterle en la cabeza que solo es un juego de Silvia, y haré que te busque

— cuando termine todo esto, y tenga las suficientes pruebas de que Ricardo se ira a la cárcel lo buscare

—el también

—me tengo que ir, se esta haciendo tarde— me pare de la silla— fue un gusto haber hablado contigo, espero y James este bien y por favor no le digas nada, si te lo conté es por algo— estreche la mano con el

—claro, tenlo seguro, cualquier cosa no dudes en llamarme, sabes que soy abogado

—sí— empece a caminar, y extendí el paraguas y camine al carro.

"Recuerdos"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora