¡Adicciones Lobunas!

Pareja: Scott x Isaac.

Título: "Aroma"

<<Todo de ti es mi mayor deseo>>

Pov. Isaac.

Dos horas. Solamente habían pasado dos horas y me sentía a morir.

¿Porqué? ¡Ja! Ni siquiera yo lo sabía.

-¿Qué ocurre rubiesin?- pregunta el hablador y mejor amigo del amor de mi vida.

-¿Stiles, donde están? -la impotencia esta por llegar a mi, pero aun trato de reprimirla.

-No, me dijeron nada sobre donde irían. -bien, listo e llegado al limite, estaba a punto de desplomar me cuando el ruido de la puerta del loft hace ese chillido al ser abierta. Por el ingresan; dos cansados hombres, uno es mio claro y el otro bueno el del chico imperativo que estaba hacia unos minutos junto a mi, ya que ahora se encuentra colgado del cuello, del susodicho; ojos verdes y cuerpo de jugador de rugby. Pero junto a el estaba quien mis ojos más deseaban con gran euforia ver...

-Hey, Isaac. -me sonríe. Es tan sensual con esa sonrisa.

Miro a mi alrededor y por arte de magia la pareja del antiguo alfa y el humano adicto al aderil desaparecieron. Pero que gracias a mi agudo y cruel oído escucho que están en la ducha, y no están precisamente bañándose.

Cuando decido salir de mis pensamientos, descubro a mi bello dios griego frente mio.

-Sabes yo también quiero que nos tomemos un baño juntos. -por inercia gimo y muerdo mi labio con delicia. Asiento, notando como esa hermosa sonrisa se extiende más por tu moreno rostro. Tu piel sudorosa, anda a saber que investigación estuvieren haciendo con el gruñón de Derek, pero si que digo que como sea que este mi Scott es el hombre-lobo-alfa mas sexy de todo Beacon Hills, California y que va todo el universo...

-Ese aroma me agrada. Vallamos a casa antes de que no pueda controlarme risitos. -habla en modo alfa Scotty logrando que todo mi cuerpo se estremeciera, si ya estaba excitado no se imaginan como estaba justo ahora. Mi cuerpo si que ardía. Y el aroma a excitación de mi caliente alfa no dejaban que desear.

***

El ruido del agua cayendo por la regadera era ensordecedor, el vapor que daba a notar su presencia por toda aquella extensión de paredes contadas con la puerta de entrada impidiendo cualquier escapatoria; ya sea de lo que sea.

-Isaac. -ruges, mientras destrozas de una sola vez mis ropas, con tus afiladas garras.

Observo tus ojos están rojos y dilatados como nunca, tu fuerte sudor esta impregnado de una especie de afrodisíaco para mi lobo. Siento que he enloquecido, si ya no lo había hecho hacia tiempo.

-¡Scott! -grito desmesuradamente al sentir esa dulce y excitante hundida de tus colmillos lobunos marcandome. -Y...ya... --suspiro, vuelvo la mirada hacia aquel techo tan blanco y percutido por los años.

Tus manos recorren con ímpetu mi abdomen, espalda, llegando a mis caderas donde las remarcas y apoyas contra las tuyas. Me estas matando, ¿porqué tardas tanto?

Otro gemido se escucha por mi parte, recorres dejando besos y chupetones por todo mi cuello, mientras tus manos juegan con mis delicados glúteos. Tus labios y dientes se concentran en mis rojizos pezones, torturándolos, dándole ese impetuoso e incontable placer.

-Abre la boca. -y eso hago, tres dedos ingresan en mi boca, sin más comienzo a lamerlos; desde la base, hasta el tope y así repetidas veces, el agua nos baña tenuemente, mientras llevamos a cabo nuestro acto.

-Scott, ¿qué es ese aroma tan fuerte? -pregunto ya con mi boca liberada. Y mi respiración cargada de pequeños espasmo.

Cuando intento volver a preguntar, mi vos se entrecorta al sentir como mi cuerpo es levantado y apoyado con fuerza contra la fría y mojada pared. Haciendo que mis piernas se enrosquen alrededor de tu cintura, mientras una de tus manos -ensalivada - se posiciona en mis apretada entrada. Ingresando el primer dedo comienzas a moverlo de manera exquisita, era extraño no dolía y sabe doler en ocasiones con solo un dedo, pero esta vez no es así. Siento que es insuficiente, pareces darte cuenta de ello y metes el segundo y tercer dedo moviendolos, ampliando mi apretado ano. Ya una ves terminado el proceso colocas la punta de tu erecto pene, y sin nada más que tus intimidantes y excitados ojos sangre me penetras. Mis ojos se vuelven de un dorado intenso, una notable sonrisa se expande por tu rostro.

-Si, que me traes loco, mi rulitos. -suspiras no muy lejos de mis labios. De los cuales luego muerdes y lames, al tiempo que buscas el ingreso a mi cavidad vocal. Que te permito de inmediato. Tu lengua se adentra recorriendo cada parte de mi boca, tocas mi lengua juntándola con la tuya y así lograr una pequeña guerra entre ellas. La cual ganas sin mas.

-Ya mueve te, no aguantó mas. -digo, aferrándome a tu cintura y hombros.

-Como ordenes. -dices y comienzas a moverte en mi interior. De manera intensas sales y entras en mi dilatado ano. Logrando tocar lugares mas que deliciosos.

--¡Ah! Di...os... --grito, has encontrado mi punto dulce, ante eso vuelves tus envestidas constantes para tocar ese punto, lograndolo en cada movimiento.

El agua sigue fluyendo desde arriba nuestro, el calor es tan intenso, pero aun así no sabría distinguir si es el agua o nuestros cuerpos lo mas caliente en este momento.

Los jadeos por parte de ambos van en aumento, agradezco internamente que Melisa tuviera doble turno esa noche. Porque su hijo realmente se encontraba con las energía muy al tope y no dejaría pasar esa oportunidad de follar toda la noche entera.

-Ah... Isa...ac... -estas por llegar al climax, yo igual, ya no lo resisto. Quiero venirme de una maldita ves.

Siento mi cuerpo ser llenado de una manera descomunal, ese calor que antes estaba sintiendo se había intensificado. Si que era un verdadero mundo de placer...

Te viniste en mi interior, mientras yo me corría entre nuestros abdómenes pero fue rápidamente disperso por la constante llovizna tibia cayendo por nosotros.

-¿Esto debería de tomarlo como que estas de muy buen humor, Scotty? -juego, mientras me acercó a tus labios, mas no respondes y juntas tus labios con los mio.

-Quiero hacértelo hasta que olvides lo que es caminar. -gemí como respuesta, y tus manos me apretaron con fuerza, mientras me dirigías con rapidez, mojado hasta la cama de tu habitación. -Olvidate de salir de esta habitación esta noche.

-Si mi alfa... -sonrió ampliamente. -soy todo tuyo...

***

Al día siguiente realmente me costaba caminar, eso de que Scott sea el Alfa y el activo en nuestra relación un día terminaría con mi pobre ser...

Pero lo que si nunca me arrepentiré de estar entre sus brazos cada mañana, día, tarde y noche, además su aroma es mi mayor afrodisíaco para seguir con vida...

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Bien, holisss eso es todo por el momento. Je Espero y les guste este pequeño shot. Nose si hacerle una segunda parte es como que si se podría, me encantaría su opinión y pues sólo eso.

VOTEN Y COMENTEN. :)

los leo cuando me lean. *-*/