III

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Pasaremos por alto que no me apellido Stuart.

—Y tú un poco más de consideración, Miller.

Se detiene, vuelve la cabeza y arquea las cejas, sorprendido. Aprieto los labios con fuerza y flexiono las rodillas para ponerme en pie, levantando la barbilla retadora.

—¿Perdona?

Sonrío.

—Lo has oído. Cuando una chica derrama su bolso enfrente de ti, cabe esperar una ligera ayuda o al menos ¡que no le pises las hojas! —le tendí una hoja con la marca de su huella.

Las comisuras de Miller temblaron levemente.

—Hasta luego, Ally.

—¡Me llamo Allison! —Rujo antes de darme la vuelta y despotricar.





Los Dientes De Miller #PLaurel2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora