Parte 5: La decisión.

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Mía no sabe por dónde empezar. Cita a Kayden en su casa.

M: Iré al grano.

Los ojos de Kayden brillaron aún más.

K: ¿A qué te refieres?

M: Lo intentaré. Seremos novios, pero antes necesito terminar mis estudios.

K: Me haces el chico más  feliz del mundo. No te decepcionaré, lo juro.

Al ver el comportamiento de sus padres hacia ella, Mía quiere escapar de la realidad. Quiere experimentar un noviazgo, quiere pasar a otro nivel. Piensa que ya no le importa a sus padres. Su padre es un mal nacido, como así lo dice, y su madre una masoquista por aguantar las bajezas de su nuevo marido. Ella hace lo que él quiera, él la humilla y la maltrata. Desde que está con él, sólo vive por él y ha dejado a un lado a su hija.

Javier es una moneda de dos caras: con Mía se comporta como el padre que tanto le hizo falta, la verdad es que se ha portado bien con ella. Él, antes de Lupe, tuvo 3 hijos. La mayoría del tiempo, aunque no sea delante de su familia, la humilla y la tiene como esclava. Mía no soporta ver a su madre tan sutil con ese pendejo, como le suele decir y por tal razón, ha tenido muchos pleitos con él. Trata de estar al margen de la la relación de su madre, pero no lo consigue. Lupe siempre sale a defender a Javier de las "injusticias" de Mía. Él se ha marchado varias veces de casa, pero Lupe va donde quiera que él esté porque lo ama.

***
Mía ya no es la inocente, dulce y tierna niña que solía ser. Ya tiene 18 años y muy pronto empezará la universidad. Ella ya no es tan obediente como antes, ahora es respondona, insolente, odiaba porque sí y no le importaba reconocerlo. Se convirtió en un monstruo. Ha sufrido, la verdad, por todo lo que ha tenido que vivir: la irresponsabilidad de Jorge, el poco cariño de su madre, su "violación" por parte de su primo, las responsabilidades que llegan a medida que se va haciendo más adulta, las precariedades, todo, todo la afecta.

***
Su madre ahora es maestra y se siente muy feliz por haber obtenido lo que siempre quiso: ser profesional. Su padre pasó de ser Don Jorge, a empleadillo de quinta. Lupe se alegra del fracaso de su ex-esposo y lucha para que ahora Mía salga adelante.

Kayden ha esperado mucho por la repuesta de Mía, saca valor de donde no lo tenía y la enfrenta.

K: ¿Podemos hablar?

M: Claro- dice un poco asustada sospechando lo que Kayden tenía que decirle.

K: Me estás matando Mía. Eres hermosa. Eres perfecta. Se mi novia por favor.

M: ¡¿Eeeeh?! Yo... No sé qué decir Kayd.

K: Sólo dime sí o... No- baja su cabeza para que no lo vea triste.

M: Sí.

K: ¿Qué dijiste?- se levanta de su asiento y levanta a Mía del suyo.

M: Quiero ser tu novia.

Él no sabe si llorar, si saltar, si besarla. Por lo general Kayden es muy sentimental. Él ama de verdad y lo ha sabido demostrar. Es muy sensible y es lo que le gusta a Mía, pero ella no quiso ser su novia. Era tan inmensa la necesidad de verlo, de hablar horas y horas de cualquier tema con él, que temía que si le decía NO, él ya no volvería. Inmoló su amor por él.

***
Mía y Kayden ya tienen una semana juntos. Ella quiere experimentar lo del primero beso, pero se ha vuelto tímida y no le insinúa a Kayden que en realidad desea que la bese. Sin más Kayden se acerca a ella más de lo que acostumbraba. Toma sus manos muy despacio y las empieza a besar muy suavemente. Ella sospecha que será en ese momento, ambos lo desean. Coloca sus manos en su rostro, ella cierra los ojos y de repente, él coloca sus labios sobre los de ella. Fue un momento muy especial para ambos. Para él porque nunca había tenido novia y porque ahora sabe el significado del amor, y para ella porque no quiere que él se aleje de ella y también porque quiere una distracción tras pasar por tanto.

InocenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora