Capítulo 6

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Un día atareado


Quisiera estar sentada viendo una serie o película en mi televisión pero no puedo darme ese lujo, si estoy sentada, pero para reunir las cartas que me dio el asesino de Cold street, si quiere que reúna pistas con sus cartas para inculparlo está bien, pero los resultados no me convencen mucho, porque sólo tengo cuatro cartas y una quinta si contáramos las que me daría hoy. Estas son las pistas que he reunido con suerte con sus cartas.

1. Que era hombre.

2. Estoy más cerca de lo que tú te imaginas.

3. Todo esta en la confianza.

4. Rebecca Rose será una gran ayuda en esto.

Y si, para mi gran suerte solo tengo estas pistas, pero con estas pistas todavía no puedo dar un veredicto para acusar a cualquier persona, lo único asegurado que tengo es que es un hombre y ya, hay varios hombres en Overlond, si interrogo a todos los hombres que viven en Overlond tardaría mucho y si se entera el asesino tendría ventaja y tal vez se iría a las ciudades cercanas de Overlond, aunque podríamos poner seguridad en las casetas pero eso lo considero una idea extremista, mejor lo dejo para casos extremos esa idea. Mejor decido empezar con todo lo que tengo planeado para el día de hoy.

Decido recoger todo lo que tengo en la pequeña mesa que tengo al frente de mi sillón en la sala—que nada más eran las cartas—. Terminado de recoger y guardar todo, me cambio rápido con lo que me encontré en mi clóset y literal me vestí lo primero que encontré en mi clóset. Ya que estaba toda lista agarre mi bolsa y salí de mi departamento, camino a paso rápido porque no quería entretenerme con mis vecinos y a Josh.

Ya que llegue al estacionamiento logrando mi cometido de evadir a mis vecinos y al portero. Voy en camino a mi auto y ya adentro en el, decido ir a mi primera parada que es la morgue de la ciudad de overlond.

***

Llegue y como pude rápido me dirijo al cuarto A que fue el cuarto donde estuvieron con la joven Melissa Rose, abro la puerta y solo visualizo a Angie, quien se encontraba con el cuerpo y al escuchar la puerta volteó a verme con cara confundida para luego verme con cara enojada. Si es cierto de lo que dicen, ella es de carácter difícil y creo que tal vez me empiece a reclamar.

—Thompson, no le dije que fuera ayer— inquirió con un tono bastante de enojo.

—Sí, pero tuve un contratiempo y cuando iba en camino me empecé a acordar que cerraban la morgue temprano por ser día de descanso, y mejor me regrese —conteste apenada.

Se empezó a reír y yo no entendía su repentino cambio de humor, por lo menos para mí es muy raro que estés bastante enojada por una buena razón y que luego te rías de la nada como si te acordarás de un suceso a chiste que te causó gracia en el momento. Me toma por el hombro y como puede habla.

—Me dijieron que eras una persona temperamental y que no te dejas intimidar por nada —recuperaba aire como podía entre risas. Al parecer no es secreto para nada del personal de la comisaría, de los del semefo y la morgue, saber cómo es cada uno —. Hubieras visto tu cara de susto, esta bien que sea una mujer difícil pero no soy tan así para causar miedo a la gente.

No sabía que decir ante eso, no se porque pero me sentía algo incómoda por la situación por absurda que sea.

—Bien —fue lo único que salió de mis labios mientras me encogía de hombros.

—Ya me caíste bien, espero no haberte asustado —y vaya que si me asusto —. Dejame te entrego todo lo que pude encontrar en el cuerpo de la joven, ven acompañame sin miedo —me hizo un ademán de seguirla y yo solo me limite a hacerlo.

El asesino de cold street Donde viven las historias. Descúbrelo ahora