Abrí los ojos y al instante pude darme cuenta de que la habitación en la que estaba no era la mía.
Me giré sobre mi misma en la cama y me topé de frente con un Marc Bartra adormilado y por lo que dejaban ver las sabanas, sin camiseta.
Espera, ¿habiamos dormido juntos? ¿que había pasado aquí?
- Buenos días dormilona.
- Buenos días - dije sonriendo, y es entonces cuando mi cerebro acabó de despertarse por completo y recordé lo que había pasado esa noche.
*Flashback*
Se creó un silencio un tanto incómodo entre los dos. Ambos nos mirábamos el uno al otro. Posó su mano en mi mejilla y redujo la distancia que había entre nosotros juntando nuestros labios en un tierno beso, pero que poco a poco se fue volviendo más apasionado. La temperatura de la habitación fue subiendo y la ropa empezaba a sobrar.
Agarró mi camiseta por la parte inferior y me la quitó cuidadosamente, mientras yo levanté mis brazos para que le fuera más fácil deshacerse de ella.
Me tumbe en la cama y él se colocó encima mía con sus piernas a ambos lados de mi cuerpo, y ahora fui yo la que saqué su camiseta dejando a la vista su trabajado torso.
Fue dejando pequeños y tiernos besos por todo mi cuerpo, empezando por mi cuello y pasando por mis pechos y mi vientre hasta que la tela de mi pantalón le impidió continuar.
Volvió a besar mis labios y yo le dediqué una mirada cómplice dándole permiso para que continuara.
Desabrochó el botón de mi pantalón y se deshizo de ellos dejándolos caer en cualquier lugar de la habitación y después hizo lo mismo con los suyos.
Seguimos con la ropa interior hasta quedar nuestros cuerpos totalmente desnudos, entonces sacó un preservativo de un cajón de su mesilla y el resto ya os lo podéis imaginar.
*Fin del flashback*
- ¿Que tal has dormido?
- Bien, muy bien la verdad. - ¿como voy a dormir teniendo a mi lado a uno de los chicos más guapos de este planeta? Pensé. - ¿como se ha despertado tu tobillo?
- Bastante bien, ya no me duele nada. Ahora más tarde tengo que ir a hacerme unas pruebas para confirmar que no es nada grave. - dijo mientras llevaba un mechón de mi pelo detrás de mi oreja. - ¿desayunamos?
- Si claro, vamos.
Marc se sentó en el borde de la cama, cogió sus calzoncillos del suelo y se los puso. Mientras tanto yo seguía tumbada en la cama tapada hasta los hombros por las sabanas.
-¿vamos?
- Mm... Tengo que vestirme, si no te importa...- dije algo cortada. Marc solo rió y salió de la habitación.
Cogí mi ropa interior, me la puse, y como no me apetecía tener que ponerme ahora mis vaqueros y camiseta, no se me ocurrió otra idea que coger la camiseta de Marc que estaba tirada por los suelos y ponermela. Me quedaba como si fuera un vestido por encima de las rodillas, pero era cómoda y eso serviría.
Bajé a la cocina y allí estaba Marc preparando el desayuno.
- Te queda mejor que a mi - dijo haciendo referencia a su camiseta que llevaba puesta mientras dejaba una bandeja con tostadas sobre la isla de la cocina.
- ¿Tu crees? - asintió y se acercó a mi para darme un beso en los labios.
*Narra Bartra*
Mi hermano Eric vino a recogerme en su coche para acompañarme a la clínica para hacerme las pruebas. Durante el trayecto charlabamos animadamente, aunque en realidad mi mente estaba en otro sitio.
Solo podía pensar en el momento en que abrí los ojos esa mañana y me encontré con la mujer más bonita del mundo durmiendo en mi cama. Tantas veces había deseado despertarme así...
La mágica noche de ayer me hizo olvidarme del dolor que había sentido horas antes por la lesión, aunque por suerte ese dolor ya había desaparecido.
Después de una hora en la clínica haciéndome pruebas al fin terminamos y como esperaba, la lesión no había sido nada mas que un esguince leve, aunque tendría que estar dos semanas de baja por precaución.
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¡Holiiiis! Quiero dedicar este capitulo a @Adriana_5676 y a @cdemessi por estar siempre tan activas con la nove, gracias chicas! <3
