Capítulo 37

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Las dos semanas transcurrieron igual: yo ayudaba a Marc a echarse la pomada en su tobillo todas las noches y me ocupaba de la mayor parte de las tareas de la casa, sobretodo de ir a hacer la compra, ya que él no debía andar mucho para no forzar.

Nuestra "relación" o lo que quiera que fuera iba a mejor, los besos se volvieron algo ya casi cotidiano entre nosotros.

Sergi y Coral, entre otros, venían a casa a visitarlo siempre que podían y pasábamos buenos momentos.

Pero las dos semanas ya habían pasado y le habían dado el alta a Marc, lo que significaba que ya podía volver a los entrenamientos y partidos.

El mismo día que le dieron el alta, Marc me invitó a comer a un restaurante, según él para darme las gracias por haberlo cuidado estas dos semanas, y después de ahí estuvimos paseando y nos sentamos un rato en el banco de un parque, sin duda fue un bonito día.

Ahora me encontraba en mi habitación hablando por skype con Mery.

- ¡Hola amol!-así era como nos llamábamos de forma cariñosa - ¿Que tal por allí? - le pregunté.

- ¡Hola _______! Bien, bueno, todo sigue igual - dijo riendo - te echamos mucho de menos...

- Yo también echo mucho de menos todo aquello... - dije algo triste.

- ¿Y por allí que tal?, ¿no tienes nada importante que contarme?

- Por aquí todo bien. ¿Importante?, ¿a qué te refieres?

- Mira tu móvil.

Miré mi móvil y Mery me había pasado un enlace de una conocida web de prensa rosa, me quedé boquiabierta cuando vi lo que salía.

"Y hablando de amores, parece ser que Marc Bartra, el joven defensa del Fútbol Club Barcelona, ha encontrado el suyo. Así de cariñoso se le vio paseando por las calles de Barcelona con una chica que, de momento, se desconoce quien es. ¿Sera esta la definitiva? Aún no hay nada oficial, pero viendo las fotos es evidente que algo se cuece entre los dos tortolitos."

Al final de la noticia aparecían dos fotos: una mientras caminábamos agarrados de la mano y otra donde salía Marc pasando su brazo por mis hombros mientras me daba un beso en la mejilla, ambas eran del día que le dieron el alta y fuimos a "celebrarlo".

No me lo podía creer, yo saliendo en las revistas del corazón, me quería morir.

- No puede ser...- dije cuando acabé de leer la noticia.

- Eso digo yo, no puede ser que no le hayas contado nada a tu mejor amiga.

- Te juro que no somos nada.

- Las imágenes parecen no decir lo mismo.

- Tía, te estoy diciendo que no somos nada, a veces nos ponemos así de "cariñosos" pero aún no somos nada. ¿Vas a creer antes a la prensa que a tu mejor amiga?

- Si fueras mi mejor amiga me hubieras dicho algo aunque no fuerais nada. Para eso están las amigas, para contarse las cosas. Pero ya veo que desde que estás allí ya no quieres cuentas conmigo...

- Mery, ¿se puede saber que te pasa?, ¿me estás diciendo que te has enfadado por esa tontería?

Y colgó dando a entender que la respuesta era si. Años de amistad tirados a la basura, genial eh. Demasiado raro era que todo empezara a ir bien en mi vida, sabia que algo se tenia que torcer.

¿Y ahora que hacía? ¿Se lo enseñaba a Marc o no? No, no creo que fuera buena idea, o al menos de momento.

No podía más. Aún sentada en la cama, aparté el portátil a un lado, rodee mis piernas con los brazos y las lágrimas empezaron a salir de mis ojos sin pedir permiso.

¿Porque a mi? ¿tan difícil es ser feliz?, me preguntaba a mi misma. Lo sollozos y llantos incontrolables eran cada vez más fuertes.

- ¿se puede? - escuché a Marc desde el otro lado de la puerta, pero ni si quiera me molesté en contestarle. - ¿_______?

Seguí sin responder, hasta que se decidió a entrar.

- ¿Estas bien? - preguntó mientras se sentaba conmigo en la cama.

- No... - dije aún entre llantos y me apoyé en su hombro mientras él me abrazaba.

- ¿Que te pasa? - dijo cuando mis sollozos ya eran más suaves.

- Es Mery, mi mejor... mi ex-mejor amiga.

- ¿Que ha pasado? - ¿le debería decir la verdad con todos los detalles o no?

- Se ha enfadado conmigo, dice que ya no le cuento nada desde que estoy aquí - dije secando las lágrimas que aún quedaban en mi cara.

- La distancia es muy difícil de llevar. ¿Tan importante era lo que le tendrías que haber contado?

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Chan chan chaaaan. Y hasta aquí el capítulo de hoy, ¿le dirá la verdad? Lo siento por dejaros con el hype jajajaja <3

Bendita casualidad | Marc Bartra y tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora