Capitulo 6.

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.....Esa frase, por algún motivo creo que la repetiremos mucho durante el tiempo que andemos.
-Annie - grita mi padre, lo que me saca de mis pensamientos.
-¿Qué pasó?
-¿Quién te dio permiso de salir? - me grita - nadie, Ian te vio en la plaza con un chavo, con quien no tenías permiso de salir.
-Solo estuve aquí en la plaza, no me fui más lejos
-Yo no dije aquí cerca si puedes salir sin permiso, para cualquier salida me tienes que avisar. - me dice muy exaltado.
-Te avisaré para la otra. - le digo de igual manera enojada.
-Vete a tu cuarto, y estas castigada.
Me dirijo hacia mi cuarto cuando veo a Ian y lo fulminó con la mirada.
Cuando entro, rompo en llanto, como es posible que después de un tan hermoso día mi familia lo tengo que arruinar con sus regaños absurdos, valla que saben cómo poner mal a alguien.

Ya es muy noche, estoy acostada en mi cama, que por una remodelación en mi cuarto y una instalación de un closet en el mismo, mi nueva habitación temporal es la sala, todo está en silencio y cada quien en su habitación. En eso entra una llamada a mi móvil. Lo cojo y corro a mi cuarto donde no hay ni un solo mueble.
-¿Diga? - contestó.
-Annie, soy Peter.
-Hola. - digo con una sonrisa en mi cara.
-Buenas noches mi amor.
-Buenas noches mi niño. - dije casi en un susurro.
Me pare de mi cama y me fui a mi habitación para poder hablar con Peter.
-¿Qué haces? - me preguntó.
-Entro a mi habitación.
-Bien.
-Bien.
-Me gustas mucho, estoy muy feliz de que seas mi novia.
-Yo también estoy feliz, espero y esto funcione.
-Veras que si. - me seguro.
-En quince días no nos podremos ver.
-¿Por qué? - le pregunte muy triste.
-Me voy a casa de mi abuela empezando las vacaciones de Semana Santa.
Diablos.
-Bien, no importa nos podremos ver después. - dije.
-Claro mi niña, pero todas las noches, hablaremos por teléfono ¿vale?
-Vale.
-Te quiero Annie, descansa.
-Descansa Peter, te quiero.
Terminando mi frase colgué la llamada, y con una sonrisa de oreja a oreja me fui a mi cama, vi la hora en mi reloj de mano y ya eran más de las 12:00. Me quede dormida al instante.
Ya habían empezado las vacaciones, podía hacer lo que quería. Quede con mis amigos, Neil, Fersha, Tamara y Dayana, Ian también iría, nos veríamos en el lugar de siempre "La bola" así conocían todos a un pequeño juego de la unidad dónde está mi institución, fuimos para haya. Llegamos al lugar mi hermano y yo en la moto que tiene, y esperamos, seguro se les había echo un poco tarde.
-Disculpen la tardanza, la mamá de Tamara no la dejaba salir y tuvimos que irle a pedir permiso. - se justificó Neil.
-No se preocupen. - dije.
-¿Traen cigarros? - preguntó mi hermano.
-Si. - respondió Fersha.
Estuvimos platicando un rato y fumando, hasta que a Dayana se le ocurrió.
-¿Y si vamos con Francisco?
Era lo último que necesitaba, Francisco y Abraham son amigos y seguro están juntos. Y desde que empecé a andar con Peter eh hablado muy pocas veces con el.
-No inventes Dayana, que te guste no quiere decir que lo tengas que acosar. - dijo Neil.
-Vamos, hoy es su cumpleaños y quiero felicitarlo.
-Bien, vamos. - dijimos todos.
Caminamos hacia casa de Francisco, quien vivía justo a un lado de Lízbeth, que por cierto no vino, no queda muy lejos así que solo tuvimos que caminar 15 minutos. Ian y Neil se fueron en la moto.
-¿Por qué no vino Liz? - pregunté.
-Salio, no está en su casa. - me respondió Dayana.
-Bien.
Llegamos a la cerrada donde vive Francisco, y desde afuera vi que allí estaba Abraham. Entramos y Dayana en seguida fue a felicitarlo. Tamara y yo nos quedamos afuera a que llegaran Ian y Neil, seguro habían ido por más cigarros.

En cuanto llegaron, entramos. Cruzar viradas con Abraham me provoco un ligero dolor de estomago, me sentí nerviosa y apenada, que despues de lo que tuvimos no nos pudiéramos ni decir hola. 

Paso el rato y la diversión con mis amigos estaba al cien, me la pase de maravilla. Hasta que, empezó una tormenta, hacia demasiado frío, Francisco, Abraham y Dayana se acercaron a nosotros puesto que estábamos bajo un techo y ellos no. Todos empezaron a molestar con Abraham, solía hablarles mucho de el. 

-Vamos, dense un pequeño beso. - Dijo Dayana.

-Vamos Abraham, mueres por darcelo. - Dijo Fernando enseguida de que Dayana terminara su oración.

Abraham y yo nos volteamos a ver un poco incómodos. Nunca se lo dije pero me supuse que el sabia que tenia novio, puesto que Fernando si estaba enterado.

-Ella tiene novio. - Dijo Abraham muy serio y sin siquiera voltearme a ver.

Lo sabia, el ya se había enterado.

-No tengo. -Dije antes de pensar lo que iba a salir de mi boca.

-No digas mentiras, yo se que si. -Me respondió el viéndome a los ojos.

-Tu no sabes nada, enserio, no tengo ninguna relación, ¿Verdad Neil? -Dije.

-Soy su mejor amigo, se todo de ella, no tiene ninguna relación. - Dijo Neil. 

El y yo estábamos casi casi conectados, cuando le hice la pregunta a el, el sabia que tenia que mentir. Yo le había contado a detalle de mi relación con Peter, solo que el sabia que Abraham me gustaba demasiado y talvez por eso me ayudo.

-¿Entonces? ¿Se besaran? - Pregunto Tamara.

Abraham y yo cruzamos miradas, realmente estaba muy nerviosa. Sabia que iba a pasar.

-¡Beso, beso, beso, beso! - Gritaban todos mis amigos al unisono.

Nos sentamos de frente y nos dimos un beso. No tengo palabras para describirlo, era un beso tierno y lleno de nervios a la vez. Lo sentía en sus labios, eran suaves pero acompañados de los movimientos venían con ello un ligero nemblorcillo. Duro poco menos de 5 segundos. Me sentía feliz, nunca me había besado con el, ni siquiera uno pequeño, este era el primero y sin dudarlo, se que también el ultimo...

Cuando mires las estrellas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora