-Eso no volverá a pasar -dijo Ward-. Prefiero morir antes que volver a hacerla daño. Si me disculpáis -dijo levantándose y saliendo de la cocina, con los puños fuertemente cerrados y la cabeza gacha.
-¡Ward!- fulmine a Jemma con la mirada y le seguí. Cuando al fin lo encontré estaba dando puñetazos al saco de boxeo, con las manos desnudas. Daba con energía, tanto que daba la sensación de que iba a romperlo. Me acerqué a él.
-Ward, tranquilo, ya está. Déjalo- el pareció no escucharme- Grant para por favor, vas a hacerte daño- le pedí ya con lágrimas en los ojos.
Me acerqué a él, sabiendo que podría ganarme un puñetazo y puse mis manos sobre sus hombros. Se tensó aún más.
-Aléjate de mí- me dijo.
-No.
-Voy a hacerte daño, aléjate de mí.
-No, no me vas a hacer daño- baje mis manos por sus brazos y le abracé por la espalda, de forma que impedía que diese otro puñetazo. Ward callo de rodillas y yo con él, abrazándole, sin soltarle.
-Ya lo hice.
-Eso es el pasado.
Se deshizo de mi abrazo y apoyo ambas manos en el suelo, temblando. Me levanté y me puse frente a él.
-No te merezco- me dijo-. Soy un monstruo- sentí como las lágrimas empezaban a resbalar por mis ojos-, no soy de fiar, os traicione a todos, te hice daño. Te mereces algo mejor que yo. Deberías haberme dejado y debería haber elegido la otra opción, deberías ir por él, deberías dejarme e ir por él. Rogers te haría mucho más feliz de lo que algún día yo podré hacerte.
Le cogí la cara entre mis manos y le obligue a mirarme.
-Sí, Steve podría hacerme feliz, jamás me haría daño y me querría como a nadie, pero tú me haces feliz, más de lo que nadie me ha hecho jamás, prefiero diez minutos de felicidad a tu lado que una vida entera con cualquier otro. Yo te amo a ti, apuesto por ti, sé que puedo volver a confiar en ti, en que me amas y sí, me hiciste daño, mi corazón se partió en mil pedazos, pero lo volviste a construir. Te amo con toda mi alma y no podría estar con ningún otro.
El cogió mi cara entre sus manos y seco mis lágrimas con sus pulgares.
-Yo también te amo- me dijo y me beso como si fuera el último beso que nos fuésemos a dar en nuestra vida. Me separe y me levanté, le tendí la mano y él la cogió y se levantó. Tire de él hacia las habitaciones y cerré la puerta de mi dormitorio cuando entramos.
Le bese despacio, delicadamente, transmitiendo todo mi amor con ese beso. Esa tarde me entregue a él, me volví suya y él se volvió mío. Sellamos nuestro amor. Esa noche no salimos a cenar, ni vimos películas, sólo nos perdimos en el otro, curando viejas heridas.
ESTÁS LEYENDO
Agents of SHIELD oneshorts
FanfictionSegunda parte de "SkyeWard oneshorts" Continuación en "Como sería"