Parte 10

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Alma dejó el hospital sólo para dedicarse a su sobrina, llevada por un lacerante sentido de culpa: su pretendido acto heroico de ayudar para entretenerse no le había traído más que dolor. Rebeca cayó en una angustia crónica que le impedía actuar. George Trap consiguió aislarse en su mundo. En definitiva- pensó-, aquella no era su hija.

Alma decidió no rendirse. Habló con médicos y enfermeras y descubrió que aquélla estaba siendo una enfermedad más habitual de lo que en un principio se creía: cientos de niños de entre cuatro y quince años la padecían. Algunas enfermeras habían logrado grandes avances en los enfermos aplicándoles calor sobre los músculos y con ejercicios en las extremidades afectadas, ya fuera de manera pasiva o activa.

La pequeña Eleonor sufría de dolores de cabeza y de espalda y frecuentemente se orinaba encima. Alma observó que nunca había tenido más fuerzas y  más constancia que en aquella época ante la enfermedad de su sobrina. Eleonor pareció alimentarse de esa energía, reforzó también su incipiente carácter y en sólo siete meses pudo volver a caminar por sí sola.

Las piernas delgadas,fibrosas y una leve cojera en la pierna derecha ya no la abandonarían de por vida. El amor por su tía Alma, tampoco.

Años después, Alma se entraría de que las transmisoras de la enfermedad no eran las enfermeras, como se temía, sino las moscas. Pero entonces ya nadie pudo devolverle los años de angustia.

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En mayo de 1945 la guerra en Europa terminó, aunque el frente de los norteamericanos contra los japoneses seguía abierto.

El día 6 de agosto, los norteamericanos lanzaron una bomba sobre la ciudad japonesa de Hiroshima que mató al instante a ochenta mil personas. Tres días después repitieron la acción sobre la ciudad de Nagasaki matando, está vez, a sesenta y cinco mil personas.

Cuando el 14 de agosto se conoció la rendición de Japón, la gente se echó a la calle en Washington: Becki, George y Eleonor se abrazaban, gritaban y reían. Alma pensó en su marido Mel y en la locura de la guerra.

Más de cincuenta y cinco millones de personas murieron de manera directa o indirecta a causa de era guerra: la Segunda Guerra Mundial.

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Adrian Troadec, durante la guerra, se defendió con sus ahorros. Aunque su pretendida ampliación de negocio no llegó a consolidarse, sí consiguió poner en funcionamiento un pequeño horno con caldera con el que empezó a fábricar y abastecer su pequeño comercio.

Mientras, la vida en Europa estaba absolutamente transtornada. Por Suiza pasaban ciudadanos de todo el mundo: alemanes descontentos con el régimen y la guerra, judíos que huían de las persecuciones racistas, franceses que escapaba del régimen nazi, españoles derrotados en la guerra civil, italianos de todo espectro, izquierdistas primero y fascistas después, y toda clase de gentes de todos los países que venían a cobijarse del mundo de la guerra.

Una mañana de 1941, apareció en la puerta de su comercio Lajos con una joven violinista albanesa llamada Elena Petroncini.

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Elena Petrocini llevaba dos años huyendo desde la toma de Albania por las tropasde Mussolini. Ella era hija de Victor Petrocini, un viejo, romántico e ingenuo militar italiano que llegó  a Shkodra, ciudad natal de Elena, en el norte de Albania, siendo un joven idealista y soñador, durante la Primera Guerra Mundial.

En noviembre de 1912, los italianos, apoyando al imperio astro-húngaro tomaron esa parte del país contra los griegos, que se hicieron con el sur, para asegurarse la independencia de Albania y facilitar su penetración a los Balcanes. Victor Petrocini,  durante la toma, conoció a Muradije Ramiqi, intelectual, poeta, pintora y mujer rebelde, que quedó fascinada por la paradójica personalidad de un hombre ingenuo y candoroso y, a la vez, aguerrido y robusto. Muradije Ramiqi con una sola mirada le dejó claro que tenía que desertar y quedarse en Albania para siempre.

Víctor Petroncini supo en ese momento que no tenía elección. Tiempo después diría: " Era más peligroso abandonarla a ella que a todo mi ejército con sus generales."

SABOR A CHOCOLATEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora