Capitulo Nueve

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Capitulo nueve.

Narras tú.

Me levante a las 5 de la mañana, justo a tiempo. Me bañe y me puse el uniforme, me quedaba un poco ajustado, pero nada fuera de lo normal. Baje hacer el desayuno y se encontraban otros trabajadores.

-Buenos días. –Saludé a una señora de más o menos cincuenta años. –

-Buenos días, señorita. ¿Es la nueva? –Me saludo sonriente. –

-Sí, señora. Llegue ayer, me llamo _____, mucho gusto. –Le estreche la mano. - Ya me dijeron las instrucciones de lo que debía hacer. –Le sonreí. – Baje hacerle el desayuno al Joven Justin.

-Perfecto, linda. Bueno, al Joven Bieber le gusta que le hagan sándwiches y panqueques, eso es lo que normalmente desayuna junto con un Zumo de Naranja. –Me explico. –

-Muy bien, señora.

-Me llamo Paola y no te preocupes, yo lo haré. –Dijo mientras buscaba la harina para preparar el desayuno. –

-No se preocupe, Señora Paola. Yo lo haré, usted puede hacer sus otros deberes. –Dije amable. –

-Se ve que eres una muy obediente chica, _____. –Sonrió complacida. – Te dejaré entonces, me ocupare de limpiar la sala. –Dijo y se fue de la cocina, dejándome sola. –

Busque los ingredientes como pude, dure una media hora preparando todo. Cuando al fin termine de cocinar todo, lo puse en el plato, busque un vaso y le eche el zumo de naranja y puse todo en una bandeja para subírselo a Justin. Subí las escaleras hasta la habitación de Justin, deja la bandeja en una mesa y toque la puerta, escuche un “Pase”.

-Buenos Días, Justin. –Sonreí. –

-Buenos Días, _____. –Dijo mientras se arropaba nuevamente con la sabana. Veo que no tiene ánimos de trabajar. –

-Es hora de levantarse… -Le quite la sábana y él se sentaba. Estaba en bóxer, él se sonrojo. – No te preocupes, te buscare unos pantalones. –Le sonreí y fui en busca de unos shorts o algo que ponerse. Cuando al fin lo encontré, se los di y él se los coloco. – Te traje el desayuno. –Dije y busque la bandeja y él me miró sorprendido. –

-Eres fantástica, ____. Nadie había hecho eso por mí. –Dijo mientras comía. – Aparte me traes mi desayuno favorito. –Sonrió y tomo un poco de zumo. – Está delicioso. -Siguió comiendo. –

-Gracias, espero te haya gustado. –Sonreí. Mientras él comía ordenaba su cuarto. De repente vi un recuadro, era él y otras dos personas. - ¿Quiénes son? –Dije y mostré el recuadro. –

-Son mis hermanos y yo, los que te conté ayer. –Dijo sonriente. –

-Son hermosos. Más que todo tú hermano, eh. –Dije y reí. –

-Es igual a mí, por eso es que te atrae. –Dijo riendo. –

-¿Dices que me atraes? –Reí más aún. - ¿Quién te crees? –Lo miré. –

-¿Justin Bieber? –Dijo en forma de pregunta y me miró serio. – Soy sexy, ____, no lo puedes negar. –Dijo graciosamente. –

-Mejor termina de comer, te ves mejor callado, ah. –Dije riendo y fui al baño. –

Arregle el baño, lo lave y ordene todo mientras él veía televisión. Cuando termine el entró y se baño, mientras ordenaba, barría y coleteaba el piso. Ya casi eran las siete y había terminado casi todo. Ordene la cama y vi que Justin salió del baño en toalla.

-_____, ¿puedes salir un momento? Necesito vestirme. –Sonrió. –

-Cla-claro. –Tartamudee y salí torpemente de la habitación. –

Era estúpido como me había embobado, ¿pero como no hacerlo? Se veía tan hermoso y sexy en toalla y mojado, su torso era tan definido, se le veía las entradas y se le veía el camino a la felicidad, su abdomen se notaba claramente fuerte, era como ver a un Dios, me lo imagino desnudo, puf… Debe ser todo un Dios en la cama.

Un ruido me saco de mis sucios pensamientos, era Justin, ya se había terminado de vestir. Entre nuevamente y ya había mojado el piso y desordenado la cama.

-Justin, ya desordenaste las cosas. –Lo miré y él sonrió gracioso. –

-Te contraté para ordenar lo que desordenara. –Rió gracioso y rodee mis ojos. – Bueno, ya me voy. Recuerda darles las pastillas a mis padres y dale todo lo que ellos quieran.

-Está bien, adiós. –Me despedí de él. –

-Bien, adiós. –Sonrió y me dio un pequeño abrazo. – Y de nuevo gracias por tu ayuda ayer. –Se despidió y salió de la habitación. – Vendré a almorzar. –Gritó a lo lejos. –

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