Capitulo 7: Nuestra Nueva Realidad

34 4 0
                                    


Al fin habíamos llegado, hoy era miércoles, el día en el cual habían dicho que se iba a llevar acabo la extracción. La verdad, el viaje hasta aquí fue insoportable. Silvina, Daniela y Milagros se la pasaron cantando mientras que Eliana y Sofía hablaban con Paloma. Javier y Damián fueron los que más molestaban, quien pensaría que, a pesar de encontrarnos en medio de una catástrofe, estos dos se la pasaran golpeándose e insultándose, como un par de idiotas. En un momento del viaje, me habían cansado, por lo que coloque la camioneta en dirección contra un auto abandonado, empezaron a gritar como unos locos, esa fue la única parte buena del viaje para mí. A mitad del camino, para mi suerte, casi todos se durmieron a excepción de Javier y Milagros que charlaban, pero en vos baja para no despertar a los otros y así había sido el ambiente del vehículo hasta llegar a la ciudad.

- ¡Despierten que ya llegamos! – grito Milagros al divisar los edificios de la ciudad

Ante el grito todos despertaron, salvo por Daniela que seguía roncando. Silvina que se encontraba a su lado empezó a agitarla, estuvo de esa forma por unos cincos minutos hasta que Daniela abrió los ojos de golpe y le pegara a Silvina con uno de sus codos al estirarse.

- ¡Daniela que mierda te pasa! – grito Silvina – esto es lo que me gano por intentar despertarte.

- ¡Fue sin querer, cálmate! – le contesto la nombrada

- ¡Cállense de una maldita ves! – grite - ¡no me hagan parar la puta camioneta y dejarlas a las dos a pata!

Ante mi comentario, las dos se callaron y acto seguido fije mi vista al frente. Lo que tenía enfrente mío, no era nada más que los vestigios de lo que antes era la ciudad más importante de este país. Algunos edificios estaban destruidos mientras que otros en llamas, sus paredes tenían manchas de sangre y la mayoría mostraban marcas causadas por las criaturas. En calles podías encontrar autos aplastados por escombros o que habían chocado contra algún edificio o vehículo.

- Nada se puede salvar de esos bichos, no – dijo Sofía

- Parece que tienes razón, Sofí – afirmo Paloma mientras veía por la ventana la ciudad en ruinas

- ¿Dónde queda la Casa Blanca, Lau? – me pregunto Damián

- La verdad, no me acuerdo muy bien – dije mientras detenía la camioneta – ha pasado mucho tiempo desde que he venido

- ¡¿Cómo que no sabes?! – grito Eliana con preocupación

- Cálmense, que yo sé cómo se llega – hablo calmadamente Milagros – tenemos que seguir por esta calle, tomar la Avenida Indiana luego la Avenida Pennsylvania y listo – finalizo ella con una sonrisa

- Ven no hay problema, pongámonos en marcha – dije para acto seguido encender el auto, pero algo pasaba, el auto no se movía.

- ¿Por qué no avanzamos? – me pregunto Silvina

- No sé – fue lo único que pude articular

- ¿Tenemos gasolina? – me pregunto Paloma

- Mierda, no nos queda combustible, parece que a partir de ahora vamos a tener que ir a pata – respondí

- La suerte no está con nosotros hoy – comento Milagros – repongan la munición de sus armas, Sofía cuida de Paloma que esta desarmada

- ¿Listos? – pregunte al haber terminado de cargar la escopeta

- Si – dijeron todos

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 12, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Atravesando el Infierno Donde viven las historias. Descúbrelo ahora