Prólogo

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El tiempo ha pasado.
Las cosas han cambiado.
Pero aquí dentro todo sigue igual.
Me sigue faltando el aire cuando se trata de ti.
Me siguen sobrando palabras cuando se trata de nosotros.
Mi piel ya no ha vuelto a ser cálida.
Pues solo lo era cuando tú la tocabas.
Mis manos ahora son frías como el hielo.
Y ya no estás tú para calentarlas.
La ropa ya no huele a ti.
Tu olor se ha escapado de mi pelo.
Tu fragancia vive lejos de aquí.
Y tu lugar lo ha ocupado mi miedo.
Observo cómo pasan las horas,
sentada en la ventana.
Observo como las estaciones van y vienen.
Y como los días avanzan.
Han pasado meses, también años.
Y se me empieza a hacer difícil una eternidad sin ti.
Observo mi alrededor y nada encaja.
Porque ya no estás aquí.
Y estoy realmente avergonzada,
mi cerebro no para de repetirme que soy estúpida.
Y me siento realmente abandonada,
tanto, que hasta las paredes me piden que abandone la lucha.
Y he llorado tanto, que la luna me pregunta qué me pasa.
Y le he gritado mil veces que te quiero,
y ni siquiera ella es capaz de entender porqué.
Pero te seré sincera, yo tampoco lo entiendo.
El tiempo ha pasado.
Y seguirá pasando.
Te he querido.
Y me seguirá doliendo.
El no tenerte a mi lado,
cuando más estoy sufriendo.

Te quiero.

Lo Que Nunca Te DijeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora