#18 No Lo Vuelvas A Hacer

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Narra ____:

El movimiento en la cama de arriba a abajo me logro despertar de mi quinto sueño, busque la causante entre mi vista nublada y localice a Eva encima de mi con una sonrisa fingida

-Que paso? Que haces? Dejame dormir-le dije cubriendome la cara entre susurros

-Que te levantes _____, hoy es tu día, tenemos que ir por tu vestido y de ahí por tu hermana al aeropuerto-dijo jalando mi cobija y después mi mano

Entre pensamientos somnolientos vino a mi la frase "Hoy es viernes" abrí mis ojos de par en par y mire a Eva, ella me miro asustada por mi repentina actitud

-Pero que te pasa tía?- me dijo mirando mis acciones, ya que buscaba mi pantufla izquierda

-Hoy es viernes, Eva! Hoy tengo una cita con Ruben-le dije alegre tomando su cara entre mis manos-Debo ducharme y después ir por el vestido, hacer de comer...

-Callate!- grito Eva-Relajate, tu ve a ducharte tranquila que después vamos por tu vestido y vemos que hacemos con la comida, vale?-me miro y asenti

Si, Eva se quedo a dormir en mi casa ya que ayer en el café comenzó a llover y salimos de ahí como a las once, se nos hizo tarde entre platicas y Alex no podía ir por ella, así que la invite a mi piso y accedió, así fue como Eva brincaba sobre mi para despertarme, entre a la ducha y demore fácil unos quince minutos, salí y me dirigí a la habitación, Eva se estaba maquillando

-Que no piensas bañarte cochina-reí

-Lo hice antes de despertarte, pensé que en lo que me bañaba te despertabas pero no, tienes el sueño pesado eh-me dijo fulminandome y le Sonreí

Busque entre mi ropa y no sabia que ponerme, era la primer vez que me sucedía esto, casi siempre me ponía lo primero que veía pero esta ocación nada me apetecía, obte por un short negro y un bluson blanco con mis vans negros, deje mi pelo suelto y me maquille los ojos y los labios, Eva ya estaba lista, me esperaba en la sala, salí y la encontré en el celular

-Ya estoy lista-dije atrayendo su atención, me miro y levantó su pulgar

-No hay tiempo que perder-dijo levantándose y tomando su bolso-Vamos-se dirigió a la puerta

Tome mi bolso, cartera y celular y la seguí a la entrada, cerré mi puerta con llave y bajamos, en la puerta del edificio tomamos un sitio para que nos llevara al centro comercial en donde Eva iba a llevarte a escoger mi vestido, dentro de veinte minutos llegamos, Eva no me dejo pagar el sitio así que ella termino pagándolo.

Entramos al lugar y estaba enorme, yo jamas había entrado a un centro comercial, solo al súper con mi madre, estaba tan entusiasmada que no me di cuenta cuando Eva me tomo de la muñeca y me llevo al elevador

-Esta enorme este lugar-la mire

-Ya se, pero vienes conmigo y yo la conozco de arriba a abajo, de un lado a otro-me guiño el ojo y bajamos del elevador-Vale, primero, que tienes pensado?-me miro

-Ah, bueno, no lo se, es decir no se a donde me va a llevar-dije tímida y ella me sonrió

-Creo que se a donde ir y que comprar, sigueme-dijo alegre caminando a la tienda que tenia pensada, Caminábamos un poco rápido pero no quise decirle nada ya que se veía emocionada, al fin llegamos a una tienda llamada Forever 21, su estilo era muy hippie y muy femenino para mi gusto pero admito que una que otra prenda me gustaba.

Estaba viendo una sudadera de doble vista la cual me enamoró pero lo que mis papas me mandaban solo me ajustaba para mi alimentación y mi higiene, ya que la escuela me pagaba el piso donde me estoy quedando y lo que necesite dentro de la escuela, Eva me hablo y me dirigi con ella, tenia sus dos manos ocupadas con cinco vestidos en cada una, abrí mis ojos de par en par y después la mire

-Todo eso me voy a llevar?-pregunte asombrada y ella río

-No tonta, es para que te pruebes y elijas uno-dijo-ven vamos a los vestidores-la seguí-entra y desvistete mientras yo te paso de uno en uno y sales para verlos

Asenti y entre a uno de los vestidores, me quite la ropa y mire mi reflejo en el espejo, no me gustan lo que veía pero trataba de no pensar en eso, le dije a Eva me pasara el primero, así fue, era un vestido arriba de las rodillas rojo pegadito a mi cuerpo, mire en el espejo y negué, salí con Eva y me miro pensando mientras recorría el vestido con mirada hasta que finalmente negó

-Demasiado fino-dijo haciendo cara de asco

Después de probarme seis vestidos mas con palabras de Eva como "Muy colorido" "Demasiado corto" "Muy anticuado" entre otros comentarios, me prove el séptimo vestido, era lila de cuello y hombros descubierto, la parte del pecho a la cadera era pegadito y después tenia una caída de olanes arriba de la rodilla, lo mire en el espejo y Sonreí, este me encanto, salí y espere a Eva

-Me fascina, debes llevarte ese-dijo Eva parándose y rodeandome

-A mi también me encanto pero, cuanto cuesta?-dije preocupada buscando la etiqueta pero Eva no me dejo

-Despues la ves, ve y cambiate que lo compramos y vamos por tu hermana-dijo metiendome al vestidor, lo mire una vez mas y Sonreí, salí con el vestido en la mano y Eva estaba en la caja esperándome, me acerque.

-Cuanto va a ser?-dije sacando mi monedero, agarraria dinero de la comida no importa

-No lo se, ya pagué-la mire con asombro y enojo a la vez

-Que hiciste que?- le susurré enojada

-Tomalo como regalo, has sido una buena amiga y no se como agradecer eso-dijo tierna y negué seguido

Salimos de la tienda sin decir palabra alguna, estaba molesta por que me pagara el vestido y el transporte, aparte me sentia avergonzada, subimos al taxi y nos llevo al aeropuerto esperábamos a mi hermana en silencio

-No era mi intención hacerte enojar-susurro Eva mirando a la nada

-Solo no vuelvas a hacerlo Eva, te lo agradezco y tratare de pagarte pero no lo vuelvas a hacer, esta bien?-la mire y Sonreí

-Lo prometo, en serio lo siento-me sonrió y me abrazo.

"Vuelo 573, salida Los Ángeles, llegada Madrid, puerta 12, área internacional"

Escuche la bocina de la sala de espera y nos dirigimos a la puerta indicada, esperamos cinco minutos y salia gente mas no mi hermana, pasaron otros cinco minutos y al fin visualice a una mujer alta, delgada, cabello castaño y cargando mil maletas, Sonreí al verla batallar, me busco con la mirada y me sonrió

-Piensas quedarte ahí todo el pinche día o que?-grito y mis mejiilas se calentaron por atraer la atención de las personas, me acerque a ella

-Mariana callate por dios, me averguenzas-susurre mirándola, permanecimos cruzando miradas por segundos hasta que un abrazo sincero nos unió.

Su abrazo me inspiraba tranquilidad, felicidad y lo mas importante me sentía querida, a ser verdad la extrañaba y la necesitaba, en México solo la veía en cumpleaños y días festivos, ahora todo iba a cambiar, voy a convivir con ella por once meses y no sabia a que me enfrentaba ya que jamas convivimos mucho tiempo.

Mexicana en España  r.d.gDonde viven las historias. Descúbrelo ahora