Capitulo VIII.

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Después del sepelio Louis y su familia regresaron a casa, el omega había estado observando todo el rato a ese chico que siempre tenía la mirada al piso. Se veía tan asustado que a Louis le preocupaba, parecía tan intimidado por ese alfa.

—¿Quieres comer algo amor? —pregunto su padre tocándole el brazo haciendo que este reaccionara.

—No gracias, pero...—Louis le sonrió—¿Me prestas tu laptop? —ladeo la cabeza y le lanzo una mirada de súplica.

—Está bien Louis, solo no vayas a borrar nada—el alfa le dio un beso en la coronilla y el asintió rápidamente.

Ya con la laptop en su poder Louis se encerró en su habitación, se colocó sus lentes y abrió el buscador, tenía curiosidad y tenía que descubrir quién era ese chico y sobre todo ese alfa que tenía muy mala cara, era viejo y en verdad parecía realmente asqueroso.

<David Winters> tecleo el castaño. Una larga lista apareció, hasta tenia página de Wikipedia, el castaño observo la foto, claro que era ese sujeto, viejo, cuarentón, piel morena, ojos cafés, cabello negro, barba, bigote, gordo, en efecto. Era él.

Louis comenzó a leer con suma atención. Era dueño de una de las constructoras más importantes de estados unidos y de UK. Empresario, soltero, cuarenta y cinco años. tenía propiedades en todos lados y parecía un buen tipo, según como lo describían, pero era una figura pública ¿Qué podían decir?

<Actualmente socio del imperio Payne, el empresario Winters ha quedado a cargo de las amillonadas cuantas bancarias tras la muerte de sus mejores amigos Karen y Geoff Payne. A su cargo, tiene cientos de hoteles alrededor del mundo, casinos, bares, antros, restaurantes, campos de golf entre más. El empresario ha demostrado gran gratitud al cuidar el patrimonio del único hijo de sus fallecidos amigos. Liam James Payne>

—Liam—susurro Louis mirando la foto de ese chico. En efecto, era el joven de sus sueños, al menos ahora sabia su nombre.

El celular de Louis resonó haciendo que este diera un respingo, era Harry. El omega estuvo a punto de responder, pero decidió ignorar la llamada, apago su móvil y siguió en su lectura, por ahora no quería hablar con Harry, necesitaba tiempo a solas.

El omega hizo una mueca, no sabía en donde vivía ese chico, claro era información no se andaba regando por todos lados. Solamente sabía que residía en UK lo cual era demasiado grande.

El castaño cerro la lap y pego su cara contra su cama, cerró los ojos y dio un gran suspiro. Aun no podía creer que había ido a sepultar a su mejor amiga, eso era realmente horrible. Louis hundió su cara en el colchón y cerró los ojos, ¿Cómo seguiría sin Chelsa? ¿Con que ganas iría al colegio? ¿Qué pasaría con él? ¿Podría vivir con esa culpa?

Louis ya estaba llorando otra vez, pero era inevitable, sentía como le apretaban el pecho con tanta fuerza, se sentía vacío y culpable. Lo único que quería hacer era llorar, no quería ir al colegio, no quería ver a Harry, solamente necesitaba estar solo.

Louis se acomodó en posición fetal, en su mente solamente pasaban los buenos momentos con Chelsa, las risas, la manera en la que hablaba, aun podía escuchar su voz retumbando en su cabeza, sus gestos y todo lo que paso con ella. Había perdido a su mejor amiga y hermana. Quién sabe si algún día se podría reponer de ese golpe.

*







Dos semanas después.

Demons- Larry Stylinson Donde viven las historias. Descúbrelo ahora