Capitulo XXII

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—Nosotros seguiremos buscando a Liam. Harry es mejor que estés con tu novio—sonrió James de manera dulce—Nos vemos más tarde ¿de acuerdo?

—¿Buscar a Liam? —pregunto Louis alejándose un poco de Harry—¿Qué pasa con él?

—Una larga historia que después te contaremos Louis ¿Si? —sonrió Harry acariciándole el cabello—Es mejor que te lleve a casa, creo que han sido muchas emociones por hoy ¿No crees?

Louis asintió de manera lenta, miro a su novio por algunos segundos y le sonrió ampliamente. Louis se giró para decirle algo a Zayn pero este había desaparecido junto al rubio.

—Vámonos—menciono Harry tomándolo de la cintura y saliendo de aquella casa.

Louis estaba perdido en su mundo, solamente pensaba en su padre, ese hombre que lo había protegido siempre, ahora era el mismo que quería matarlo, y todo por un amor, pero a pesar de que estuviera "compitiendo" con su padre no se rendiría, le juro a Harry que estaría con él, pasara lo que pasara, ahora no le fallaría.

Louis podía sentir la mano firme de Harry en su cintura, se sentía seguro, con el todo era tranquilidad, ahora se daba cuenta que él no tenía la culpa de nada su padre era el culpable de todas sus desgracias hasta de la muerte de Chelsa. Eran cosas que no podría asimilar durante mucho tiempo.

Algunos minutos después llegaron a casa de Louis, el omega abrió la reja y dejo pasar a Harry, Louis saco sus llaves de su bolcillo y abrió la puerta de madera, Louis entro primero y se quitó la chaqueta, su casa siempre era templada.

Harry cerró la puerta y miro alrededor, una casa pequeña pero acogedora y sobre todo muy cálida.

Una mujer bajo las escaleras con una bebé en los brazos.

—Joven Louis—sonrió al mirarlo—Pensé que saldría.

—Regrese temprano Mica, puedes irte ya, no saldré, yo me quedo a cuidar a mi hermana ¿Te parece? —sonrió Louis intentando disimular la tristeza que sentía.

—Está bien—ella camino hacia el menor entregándole a su hermana—Nos vemos mañana, su leche se está calentando en el microondas, ya le cambié de pañal—informo tomando su abrigo el cual se encontraba en el sofá.

—Muy bien—Louis abrazo a su hermanita y le dio un beso en la mejilla.

—Con permiso—la mujer tomo su bolso y salió de la casa.

Harry se acercó a Louis y le dio un beso en la frente.

—Te ves realmente lindo cargando un bebe—sonrió el alfa tocándole la mejilla a la pequeña.

Aquella niña era hermosa, ojos celestes, piel blanca, cabello castaño con un pequeñísimo lazo en la cabeza, labios gruesos, era muy bella, llevaba un mameluco color rosa.

—Soy lindo—Louis aspiro y nariz y miro a su hermana con tristeza, ahora que se había descubierto todo ¿Qué sería de ellos? ¿Qué diría su padre? ¿Le diría que su esposo era un ángel caído?

El microondas sonó avisando que la leche estaba caliente.

—¿La sostienes? —pregunto Louis mirando a Harry—Soy torpe—se encogió de hombros el castaño.

Harry asintió y la cargo de manera delicada, la miro a los ojos e hizo un puchero provocando que la bebe sonriera un poco. El rizado le sonrió y la arrullo un poco.

—¿Cómo se llama? —Harry alzo la voz esperando que su novio lo escuchara.

—Nataneli. Pero nosotros le decimos Nataly—dijo Louis desde la cocina.

Demons- Larry Stylinson Donde viven las historias. Descúbrelo ahora