Capítulo II: "Graduación al estilo merodeador parte II".
Cuando todos los alumnos de séptimo hubieron llegado al gran comedor, que era donde se realizaría la ceremonia, el director Dumbledore comenzó con su discurso.- Un año más que pasa, una generación más que se gradúa de nuestro colegio, este año despedimos a una generación que tuvo de todo, a los mayores revoltosos que han pisado Hogwarts.- en ese momento los merodeadores hicieron una reverencia, por lo cual recibieron un golpe de cada una de sus novias.- también alumnos ejemplares, pero para que entrar en más detalles, mejor que comience la graduación.-Termino de decir el director, mientras la profesora Mcgonagall comenzaba a llamar a todos los alumnos, dejando para el final a los chicos y sus novias.
- Sirius Black.- llamo la profesora luego de haber llamado a todos los demás, Sirius luego de hacer una reverencia, subió con la cabeza en alto a buscar su diploma de graduación.- Hasta que por fin te vas.- le susurro la profesora Mcgonagall al momento que le entrego el diploma.
- Espero no me vaya a extrañar mucho Minnie, no se preocupe pronto vendrá una nueva generación merodeadora.- dijo Sirius con una gran sonrisa en su rostro, provocando en Mcgonagall casi un paro cardiaco.
- Remus Lupin.- prosiguió la profesora al salir del shock. Remus como buen merodeador que era también hizo la reverencia, y subió con la frente en alto, tomo su diploma y bajo haciendo como que se aplaudía a sí mismo al bajar.
- James Potter, premio anual.- dijo la profesora. Y James como también era merodeador hizo su expresiva reverencia, y subió corriendo al escenario, abrazo a Dumbledore y a Mcgonagall y bajo, sin darle tiempo a Mcgonagall de decir nada, y causando la risa del resto incluido el director.
- Y por último Lilian Evans, también premio anual.- En ese momento James se tensó, hizo un movimiento imperceptible con su varita, mientras tanto Lily recibía su diploma, y se lo quedaba mirando de forma penetrante, mientras Lily miraba el trozo de pergamino James corrió hasta ella y se arrodillo, extrayendo de su bolsillo una cajita de terciopelo verde esmeralda.
Cuando Lily miro a James tras haber leído el pergamino, tenía lágrimas en sus ojos ya que el pergamino decía, con una letra curva legible:
"Lilian Annick Evans, mi amada pelirroja, ¿Quisieras casarte conmigo?"
- Te repito la pregunta, Lilian Annick Evans, mi amada pelirroja, ¿Quisieras casarte conmigo?- dijo James mirando directamente los ojos verde esmeralda de Lily.
- Si, por supuesto que si James.- dijo Lily, y James extrajo de la cajita un precioso anillo con esmeraldas en forma de corazón, y se lo puso a la pelirroja que acepto encantada. Mientras tanto todos en el gran comedor, miraban la escena tiernamente.
- Bueno, tras esa profunda muestra de amor, los felicito a todos por haberse graduado y que empiece la fiesta.- dijo el director con una sonrisa.
- James Charlus Potter, ¿por qué no me avisaste que le ibas a proponer matrimonio a Evans?, maldito cervatillo.- dijo Sirius bromeando, para luego dar un fuerte abrazo a su hermano del alma.
- No vengas con eso perrito, que osino dormirás fuera hoy.- le siguió la broma James.
- Bien chicos los felicito, ¿Qué les parece si ya ponemos en acción nuestra última broma en Hogwarts?- dijo Remus, demostrando que muchas veces era él, quien incentivaba a los otros dos para hacer las bromas.
- Gran idea Lunático, pongamos en marcha el plan "Despedida" jajaja, chicas lo lamento pero nos veremos luego.- dijo James mientras arrastraba a los otros dos merodeadores fuera del gran comedor con él.
- Ay Merlín la que nos espera.- se lamentó Lily, mientras las otras dos las tenían abrazadas.
Una hora después, aparecieron nuevamente los merodeadores, con idénticas sonrisas de satisfacción, en ese momento el director propuso un brindis, y todos alzamos nuestras copas.
- Un brindis por esta nueva generación que sale de nuestra escuela, que esperamos sea muy exitosa.- dijo Dumby.
- Por Hogwarts.- corearon los recién graduados.
- ¿qué es lo que planean chicos?- pregunto curiosa Christine, porque ya le parecía extraño que aún no pasara nada.
- Ya lo verás mi amor, ya lo veras.- dijo en un tono macabro Remus.
En un momento de la puerta que se encuentra detrás de la mesa de los profesores salió un grupo de música mágico muy conocido, y todos los jóvenes hijos de mago, comenzaron a tararear sus canciones, mientras sacaban a bailar a alguien o eran sacados a bailar.
Cuando todos estuvieron bailando, incluidos los profesores, James les hizo una señal a los chicos, y ambos desapercibidamente sacaron sus varitas de entre sus túnicas, e hicieron unos pequeños movimientos, mientras tanto James hacia otro tipo de movimientos con su varita; siendo observados detenidamente por sus novias, que estaban oportunamente lejos de la pista de baile.
Del techo comenzó a caer un extraño líquido de viscoso de color verde, que no era otra cosa que baba de trol, aunque con un olor mucho más repugnante ya que estaba mezclado con desechos de hipogrifo, y también un poco de moco de trol, todos, profesores y alumnos fueron cubiertos por esa asquerosa mezcla, y luego de haber estado alrededor de un minuto con las sustancias todos se comenzaron a transformar en unas babosas tamaño gigante, por lo que los merodeadores y sus novias salieron corriendo del gran comedor, con dirección al lago, aunque aún quedaba una sorpresa especial, para un chico de la casa de las serpientes, si una broma especial para Severus Snape lo esperaba en su dormitorio.
Al salir corriendo del gran comedor se dirigieron al lago, se sentaron bajo su árbol favorito, y comenzaron a reír todos de forma escandalosa, sin duda extrañarían esos momentos.
- Increíble, no me esperaba menos de ustedes.- dijo aun riéndose Steph.
- Gracias, gracias es un honor que les haya gustado.- dijo haciéndose el tonto Sirius.
- Si, teníamos que hacer algo bueno para nuestra despedida, aunque aún hay un regalito especial para Snape, de despedida.- dijo con una sonrisa James, mientras Lily le golpeaba el brazo.
- Bien chicos será mejor que vayamos a acostarnos, mañana debemos levantarnos temprano, para tomar el expreso.- dijo Remus, mientras se paraba y ayudaba a hacerlo a Christine.
- Toda la razón Lunático.- dijo Sirius.
- Ey, tengo una duda.- dijo Christine.
- ¿Cuál duda amor?- le respondió cariñosamente su novio.
- ¿Por qué usan esos apodos específicamente?- pregunto llegando a un punto, que los chicos nunca habían tratado con sus novias, aunque ya había llegado el momento de hacerlo.
- Bien, pues como ya saben Remus es un Licántropo, de ahí viene lo de Lunático, y pues los nuestros es porque en nuestro quinto curso, nos hicimos animagos ilegales, y Sirius se transforma en un gran perro negro, por lo que le decimos Canuto, y yo me transformo en un ciervo de gran cornamenta, de ahí viene mi apodo, y al lograr ser animagos, acompañábamos a Remus en las noches de luna llena.- dijo James.
- Chicos eso fue muy peligroso.- dijo Lily regalándolos por su acostumbrada irresponsabilidad.
- Que buenos amigos son, hacer todo eso, solo porque Rem no sufriera tanto en sus transformaciones, me alegro de tener amigos como ustedes.- dijo Christine con lágrimas en los ojos.
Stephannie no dijo una palabra, solo se lanzó sobre Sirius y lo beso apasionadamente, luego todos se fueron a acostar, para a la mañana siguiente abordar por última vez el Expreso escarlata, que los llevaría de regreso a Londres, para iniciar una nueva etapa en sus vidas.
ESTÁS LEYENDO
De no haber existido Voldy
FanficResumen: Alguna vez nos hemos imaginado como sería todo si no hubieran muerto James y Lili, pero se nos ha pasado por la mente pensar en un universo paralelo al nuestro en el que todos ellos existan y en el cual sean felices, sin muertes por las...