EN SILENCIO 2

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El tenía claro lo que yo pensaba en ese momento, así que me susurro al oído;

-Solo diremos que te llevé a una sala para regañarte y punto, soy tu jefe. Baka.

Me dilató despacio con dos de sus dedos mientras su pecho estaba pegado a mi cuerpo, haciéndome sentir de pies a cabeza los latidos de su corazón. Esto me Excitaba mucho mas y me daba mas pudor.

Quitó su mano de mi boca y me penetró despacio, cosa de no hacerme sentir dolor para que de mi boca no salieran gritos. Sus dos manos terminaron en mi abdomen, haciendo presión contra el y su miembro.

Quería morderlo, arañarlo, gritar, lamer su cuerpo pero ahí nada se podía, solo era posible sentir su miembro invadiéndome lentamente mientras oíamos los sonidos suaves de una respiración mas agitada. Takano tenía su boca en mi cuello, lo lamía y humedecía mientras me poseía, mientras yo lo único que pedía es que el acaba pronto, fácilmente nos iban a descubrir y todo terminaría en escándalo. Ya me imaginaba a Isaka contándole a mi padre que fui expulsado de marukawa por tener sexo en el baño ... y con otro hombre. 

Esos nervios me hacían ponerme mas estrecho y al parecer Masamune estaba feliz de sentirme así, nervioso y excitado por culpa de su invasor cuerpo. El me embestía, penetraba y empujaba cada vez mas rápido mientras una de mis mejillas se pegaba sonrojada a una de las paredes del cubículo.

Él ya iba a acabar, no me lo dijo pero conozco su cuerpo y ya tengo un mapa de sus movimientos y respiraciones. Me acercó mas a el, me lo comenzó a hacer rápido y duro mientras me tapaba la boca porque esos movimientos de forma fija me harían gritar. Mis ojos estaban húmedos y mis ojos abiertos como nunca antes.

El acabó y rápidamente limpió su semilla para no manchar nuestra ropa, nos vestimos y me besó apasionadamente. Me dijo al oído;

-Ritsu, nunca mas me provoques en el trabajo.

Provocarlo? solo le ofrecí ayuda y todo terminó en esto!.No comprendo a este hombre a pesar de que conocerlo hace diez años.

Volvimos a la oficina haciéndonos los estúpidos. Me senté en mi lugar con un leve dolor que creo logré disimular, aunque no se cuanto porque Kisa no es para nada tonto y nos miró, para luego lanzar una breve sonrisa de maldad mirando su pantalla.

Debe ser que la camisa de Takano estaba mas arrugada que antes de haber salido a nuestra  reunión privada.


EL DIARIO SECRETO DE RITSU ONODERADonde viven las historias. Descúbrelo ahora