Capitulo 7: Secuestro

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  1:00 Pm, centro vacacional cercano a las costas de Tokyo.


Ayato y Kaneki habían empacado al día siguiente y se habían ido de su departamento, para la tarde, ya se encontraban registrándose en un hotel muy lujoso, al parecer una de las ventajas de trabajar en el CCG era que la paga era alta y de esa forma, Kaneki podía mimar y llenar a Ayato de todo lo que necesitara, y ahora también, a su nuevo bebe que venía en camino.



El peliazul se encamino con el azabache hacia su habitacion correspondiente, y ahí, dejaron todas sus cosas en su lugar.


Al terminar de acomodar todo, el menor se encontraba en el balcón de la habitación observando el hermoso paisaje que le regalaba aquel lugar, entonces, Haise sonrió y se acercó a el abrazándolo por la espalda, para después comenzar a besar su cuello suavemente, mientras que le susurraba con una voz bastante gruesa y ronca.


- Haise: Mmm...Cariño que tal si tú y yo vamos un rato a la playa, caminamos por la arena hasta que anochezca...y luego tu y yo, llegamos aquí...nos damos un baño y te hago el amor toda la noche ¿Te parece?



Ayato quien no se sorprendió del todo por el abrazo ya que lo escucho llegar, se dejó abrazar y cerro sus ojos con suavidad, mientras que se deleitaba con la cálida sensación que le brindaban los labios del mayor al tocar su cuello.



- Ayato: Me leíste la mente Parchesito...



Y así fue, ambos Ghoul salieron de la habitación y caminaron por toda la playa, de vez en vez se metían al agua y jugaban por un rato, también se abrazaban y besaban mientras nadaban para después salir y recostarse en la arena para besarse con pasión.



- Ayato: Mmm...Hacia tanto que no teníamos este tipo de escapadas....



- Haise: Mgnmm...Recuerdo que nuestra última cita igual a esta fue hace años en Aogiri ¿Recuerdas nuestra misión en aquella ciudad? Jejeje aun puedo recordar tu cara cuando te prepare aquella cena en la terraza del hotel Mmm



- Ayato: Como olvidarla...Mmm jejeje...me haces cosquillas



El azabache besaba con dulzura el cuello del menor mientras que las pequeñas olas les empapaban solo un poco.

Después de eso, caminaron un rato más hasta que llego el atardecer y después la noche. Algo sucios, entraron a la habitación y Haise cargo a Ayato llevándolo directo al jacuzi del lugar, ahí, ambos se quitaron la ropa y entraron a la relajante tina. Ahí, el mayor tomo al menor con cuidado y lo coloco en su regazo para comenzar a besar su pecho con deseo y amor.


- Haise: Mmm....Ayato...Mmm...Eres tan delicioso



- Ayato: Mmm...¿En serio? ¿Qué sabor...Que sabor tengo?



Susurro entre suspiros, mientras que abrazaba su espalda y sentía sus bien marcados músculos. Haise, al escuchar su pregunta, le respondió sin separar mucho sus labios de su pecho, para que de esa manera su aliento rosara contra su piel y le causara cosquillas.



- Haise: Sabes salado...pero también dulce...Ah...tu piel tiene un sabor tan único que no logro describirlo

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