Capítulo 3

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Estaba en mi habitación con las luces totalmente apagadas, estaba escuchando a mi banda favorita de rock.

escuche un ruido extraño que vino de mi ventana, me levante de mi cama lentamente sintiendo las sabanas de seda deslizándose por mi cuerpo, me acerque lentamente para ver que era lo que provocaba ese sonido.

se me hizo un nudo en el estomago, una gota de sudor frió resbalo por mi rostro... cuando por fin estuve lo suficientemente cerca de la ventana para ver mas allá de cristal... descubrí que no era ni mas ni menos que Edson aventando piedras a mi ventana.

Abrí mi ventana y le grite-Pero... ¿tu que haces aquí? ME HAS DADO UN GRAN SUSTO!-dije limpiándome el sudor de la cara.

-Noche de películas! déjame entrar-dijo riéndose.

Como mi habitación estaba en la planta baja de la casa solo era cuestión de que el pasara por mi ventana para entrar.

-Me acabas de ver hace unas dos horas, no podías haberme dicho que vendrías mas tarde y así no asustarme!-dije con tono molesto y casi gritando.

-Cálmate, traje papitas y chocolate, ademas traje esta película que según cuentan esta genial.

-Ok, perdonado-dije y le quite los chocolates.

-No los abras aun, deja algo para el resto.

-¿cual resto?-dije algo confundido.

-rió un poco-Que no vengo solo, también vendrán kiliam, Citlally y Ben.

-Tu estas loco, mi madre me matara si se entera que han venido sin avisar.

-Vale, si quieres me voy-dijo con tono brusco.

-No, esta bien. Quédate-dije y le sonreí.

-Ya le avisaste todos sobre nuestra aventura?-pregunto mientra se comía una papita.

Estaba a punto de responderle cuando se escucho un grito desgarrador afuera de mi ventana, sin dudarlo corrimos para ver quien había gritado, era Citlally sosteniendo un papel con sangre y a sus pies estaba... mi perro... no pude con esa imagen, una lagrima salio de mis ojos... dos... tres lagrimas, me limpie el rostro y me dispuse a salir.

-Que... oh dios! que esta pasando!!!-Dije con voz temblorosa.

Citlally corrió hacia a mi y me abrazo, Edson se quedo parado junto a mi perro, completamente paralizado... se arrodillo para ver si aun respiraba... me volteo a ver con los ojos llorosos.

Mi perro, Max, lo había tenido desde que tenia 12 años... fue un regalo de cumpleaños de parte de Edson... Max significaba mucho para nosotros dos.

-Que habrá pasado?-pregunto Edson.

-La... La nota-Dijo Citlally mientras me entregaba una hoja de papel doblada con unas manchas de sangre.

"Es mi regalo para ti, Norman, recuerdas que robaste a quien mas amaba? pues bien, ahora yo te quite a quien mas amabas... JAJAJAJA, SUERTE CON CITLALLY"

-Maldito, maldito seas Jackson-fueron las palabras que lograron salir de mi boca.

-No hay nada que hacer, esta muerto-dijo Edson mientras ponía las manos por detrás de su cuello.

-No... no pasa nada-dije y una lagrima escurrió por mi mejilla.

-QUE NO PASA NADA! COMO PUEDES DECIR ESO!- dijo Edson alterado y casi soltándome un golpe.

-Por favor... no peleen-dijo Citlally mientras se limpiaba las lagrimas con la manga de su sudadera.

-Esta bien Citlally... Norman... ese perro significaba mucho para los dos, te lo di con mucho cariño-dijo Edson mirando a max desangrándose.

-Ahora esta descansando-dije con voz llorosa.

Levante a mi perro del suelo, cerré sus ojos y me dispuse a cavar una tumba para enterrarlo.

Citlally y Edson me ayudaron a cavarla, al terminar los dos entraron un rato a mi habitación... nos quedamos sentados un rato, Citlally en mi alfombra, yo en mi cama, y Edson en la silla de mi escritorio.

Pasaron unas dos horas cuando Citlally y Edson ya mas calmados decidieron irse a su casa, me quede solo y me acurruque en mi cama, empece a llorar y por fin me quede dormido.



Detrás de la puerta. #MoonAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora