Capítulo 15

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Cada día tiene un diferente olor, un olor que lo caracteriza.

Ese día en especial, el olor del café en la mañana inundaba el acogedor comedor de la cocina.

Sentado frente ala ventana, viendo los enormes robles del patio y pensando en lo anterior se me vino a la mente una cosa: Tenia que llegar al lado bueno de aquel asesino.

Sorbí un poco del café que mi padre me había preparado, se despidió de mi y se dirigió a su trabajo.

Camine a mi habitación, era domingo... los domingos son para disfrutar la vida.

Al entrar a mi habitación cogí mi libro favorito:

"La Metamorfosis - Franz Kafka"

Es la historia de un hombre que se convierte en un insecto. Un ser humano rechazado por su familia debido a su condición y la inexplicable situación en que se encuentra.

Me recosté en la cama sin antes abrir la ventana para dejar entrar la brisa de ese hermoso día nublado.

Los pájaros cantaban como de costumbre, el canto de las aves es un pasatiempo para mi. Me encanta oír esos dulces silbidos provenientes de esas criaturas tan inocentes, tan maravillosas, tan naturales.

La naturaleza y los libros son una gran combinación, la combinación perfecta se podría decir.

Deje el libro en la mesa de noche y me dirigí a la ventana. Sin duda alguna, un hermoso día.

-Es un día maravilloso-dije y me coloque los auriculares.

Desbloquee el iPod y reproducí mi canción favorita: Tears in heaven.

La brisa de una lluvia próxima humedecía mi rostro, las nubes estaban de un color gris. Había algo raro en este día, algo que lo hacia mas hermoso aun: Un arcoíris.

Si imaginar este día es relajante, ahora verlo, respirar ese aroma a fresco y sentir la brisa... una experiencia única.

¿Quien no ama esos días de lluvia? Esos días donde te quedas dentro de casa apreciando cada gota cayendo y resbalando por las ventanas, ese sonido tan único que produce el agua al chocar contra algo solido.

¿Quien no ama esos días? Donde te puedes quedar en tu habitación, con chocolate caliente, con una manta caliente, recostado en tu cama, con una buena película o con un buen libro. Y ni hablar de ese aroma tan delicioso y único después de la lluvia, ese aroma a tierra mojada y a calles limpias.

¿Quien no ama esos días?

Quizá las personas que no saben apreciar lo bello de la naturaleza.

Quizá solo las personas hogareñas, las que preferimos un buen libro a un cigarro, una buena película a alcohol, un día en casa relajado a estar en una discoteca, quizá solo las pocas personas que quedamos así disfrutamos esos días de lluvia.

Me dirigí a la cama nuevamente y tome el libro entre mis manos. Ese olor, me recordaba a un bosque. Las hojas que antes eran de un color blanco ahora ya se habían tornado de un amarillo oxido, el color de la savia de un árbol.

Ese libro en realidad antes era un árbol, un hermoso árbol. Quizá fue un gran pino, o un oloroso roble... tal vez un manzano. Enigma.

Gracias a los árboles ahora creo que si hay vida después de la muerte.
Te preguntaras, ¿Por que? Pues bien, te lo diré así... Una semilla, una pequeña semilla, imaginala, bien. Ahora siembrala y riégala, cuídala y dale amor; Creció. Toma su tiempo, ahora es un gran árbol. Tienen que cortarlo, tu no quieres... Cortan tu árbol, lloras... Después ese árbol se convierte en libro y sigue estando contigo, aun que no de la misma manera, pero esta ahí. Lo lees, lo sientes... ¿Vez? Aun que ese árbol fue talado sigue estando contigo. Eso pasa con muchas situaciones de la vida, con un familiar quizá... ¿Comprendes?

Detrás de la puerta. #MoonAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora