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 1 mensaje no leído.

  Mabs«Dippy! Lo lamento, no iré a dormir a la cabaña hoy :c  Me siento algo mal, como deprimida y estaré en la casa de Pacífica n.n. Mañana te cuento qué ocurre. Puedes responderme algo? sé sincero eh! ¿Aprobarías si yo fuera... bisexual?»

10:36 p.m.

«Pues, supongo que sí, ¿no? Eres mi hermana y tengo que aceptar lo que tú decidas. ¿Por qué preguntas?»

10:38 p.m.

Mabs♡: «Eres capaz de derrotar a un demonio pero no eres capaz de leer lo que te escribí hace un momento? xD. Ese Dopper.»

10:38 p.m.

«"Me siento mal, como deprimida". No puedes decir que estás mal y poner un "xD", tontita xd. Ya, ya. Entonces, ¿mañana vienes y me dices?

10:39 p.m

Mabs♡: «Kyt:v Si no estás romanceando con Bill como hoy sí :D. Hasta mañana bro»

10:40 p.m.

«¡No me gusta Bill! Estás loca. Descuida, pasa si estás mucho tiempo con él. Cuídate May-MayAlégrate, buenas noches»

10:40 p.m.

Sonreí a la pantalla y apagué el celular, con la esperanza de que Mabel se encontrara bien. No sé por qué hizo esa pregunta tan extraña, no entiendo a las chicas. Pero tiene que ser algo o muy importante o muy malo para que Mabel le diga a Pacífica y no a mí.

Después de dar varias vueltas al asunto de mi hermana con Paz y la extraña situación de mis sentimientos por Bill comenzó una nueva duda:

¿Sería apropiado que Ford y Stan estuvieran al tanto del asunto?

Viéndolo del aspecto positivo, tal vez Ford lo tome de buena manera, nos ayude a Bill y a mí para su plan y que se vaya más rápido. Stan a lo mejor se llevaría bien con el cara amarilla ya que los dos casi iguales en su personalidad.
Pero del lado negativo puede ser que Stanley y Stanford aún le tengan algo de rencor, –¿quién no lo tendría?– traten de enfrentarlo y Bill enfurezca.

Pero en la vida hay riesgos que tenemos que correr para conseguir un bien mayor.

|•|•|•|


Los rayos del sol entraban por la ventana de la habitación, dejando entrar un ambiente cálido al cuarto.
Abrí los ojos. Un aroma a Pino inundaba el lugar –adoro el olor sinceramente–, me levanté de la cama y busqué mis pantuflas por el piso. Me las puse y encontré la cama de Bill vacía.

Seguramente ya estaba con los demás abajo.
Vi la hora en mi celular.

8:43 a.m.

Bien... no es muy tarde, eso creo.

De manera floja y arrastrando los pies tomé una camiseta, me puse un pantalón negro y mis Converse rojos. Salí de la habitación y con la necesidad de lavarme la cara y los dientes fui al baño.

We Meet AgainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora