Let Me Know (VJin, HopeMin, SuKook) [TERMINADA]

Capítulo 40

Let me know

No digas que terminó

No te entiendo, déjame saber

SeokJin no sabía lo que pasaba por la mente de TaeHyung en vez de hablar desde el principio con él; todo estaría mejor si no hubieran terminado, las sonrisas en los programas serían más reales, se llevarían bien, estarían más enamorados de lo que ya están.

Si tan sólo lo hubieran hablado, si tan sólo hubiera detenido a TaeHyung en ese momento, si tan sólo hubiera ido atrás de él...

Todo termina por caer, con lágrimas te lloro.

Yo te lloro, vives en mi... suspiro.

La flor de nuestro amor, que no te comprometiste a cultivar

Un bello sueño, que ya no tengo

El fuego ardiente de tu mirada

Aunque nuestro amor llegó a su fin

Yo te llevo en mi interior

Y emotivo siempre fue tu calor, que me cautivó

Yo siempre sueño, con tu regreso

Y tan sólo, te espero

Nada cambió con lo que sentía aquí dentro del corazón

Aunque esos días ya nunca volverán

Mi vida ya nunca será igual

Dí algo, por favor

Me sigo aferrando a tu inexistente amor...

Cada día TaeHyung lloraba en la ducha, sea de noche o de día, él lloraba hasta que sentía el dolor de su pecho calmarse.

Pensaba que el amor hacia SeokJin pasaría en unas semanas, pero no, su amor nunca se fue, nunca se acabó...

A veces despertaba, con una erección en sus pantalones porque soñaba las caricias y el cuerpo de su mayor, al recordar todo eso empezaba a llorar, en silencio.

Cada día sufría, pues no tenía el valor de decirle a su mayor que aún lo amaba, que aún se aferraba a él, que aún le pertenecía y que ya nunca le dejaría; sentía que era el hombre más hipócrita del mundo, le amaba, pero le dejó sin explicaciones, esa era la razón de su sentir.

Se sentía, prácticamente, enfermo de amor, enfermo del alma.

Las promesas que hicimos, desaparecieron, el domino cayó como el fin de Julieta y Romeo.

SeokJin ya no sabía en donde estaba, incluso con maquillaje se veía demacrado, nada ni nadie le ayudaba a sonreír y sólo lo hacía por compromiso.

Muchas veces recordaba todo lo que se dijeron, tanto con palabras como con acciones, despertaba con lágrimas secas en sus ojos y un corazón muy maltratado.

El mayor pensaba que su historia era más triste que Romeo y Julieta, incluso más triste que El Titanic y Siempre a Tu Lado.

Quitaste mis estrellas, el sol de mis días,

solo me dejaste una nube fría