Enfócate Tam, no viniste aquí a mirar al alemán, viniste a dejar a Leo con él. Erik nos mira a ambos, y le sonríe al pequeño, y Leo le sonríe de vuelta. Cosa que hace que la sonrisa de Erik se haga aún más brillantes que antes. Y cosa que hace que mi corazón se acelere. Si sigo siendo estúpida.
"No pensé que vendrían tan temprano" Me dice con una voz dormida, que hacía que su voz sonara más profunda.
Quedo totalmente sorprendida cuando el alemán saca a Leo de mis brazos y lo toma en los suyos por primera vez, Leo lo mira a los ojos y le sigue sonriendo
"Hola pequeño" Le dice suavemente entrando con Leo en sus brazos, y noto algunas bolsas llenas de juguetes en la sala, es imposible que tenga gestos tan tiernos y que a la misma vez sea un idiota total.
Me adentro junto a ellos y pongo la bolsa con cosas de Leo en uno de los sillones de la sala, mientras que Erik se ha sentado en la alfombra junto con el pequeño, que luce realmente encantado con tantas cosas que ve, el alemán se encarga de mostrarle todas las cosas, mientras que yo me siento y lo observo.
Leo se acerca a mostrarme cada cosa que Erik le enseña, para luego volver al lado del alemán, noto varias veces que le da abrazos como agradeciendo, yo sonrío y no digo nada, parece que todo entre Erik y yo está perfectamente bien cuando no nos hablamos, está al pendiente de cada una de las reacciones de Leo mientras camina por su casa y dice diferentes cosas. Leo sigue considerablemente muy activo por el resto de la mañana y Erik lo sigue en cada cosa que el pequeño quiere hacer, lo que encuentro absolutamente adorable. ¿Qué hago yo? Los miro y también me uno a sus juegos, pero más los miro y se me aprieta el corazón porque no le dije antes a Erik de la existencia de Leo.
Entre todos los juegos de Erik y Leo, la hora se pasa, y pronto es la hora de la comida, y noto que pronto Leo comenzará a pedir algo que comer.
"¿Quieres que cocine algo para almorzar?" Le pregunto después de casi dos horas de silencio por mi parte, ya que no habíamos tenido la necesidad de hablar mientras jugábamos con Leo.
"Podríamos salir a comer, ¿Qué comidas le gustan a Leo?" Me pregunta y me llego a sentir un poco mal porque no tiene idea de las cosas que le gustaban o no a Leo.
"Come casi de todo, pero sus favoritas son las papas fritas, podríamos ir al McDonalds, si quieres, aunque no tengo problema en cocinar" Le digo.
Él se pone de píe, y pese a que había estado junto a él por largo rato, se me había olvidado completamente el hecho de que Erik estaba solamente usando boxers, así que cuando lo noté, el calor llegó a mis mejillas. Él se da cuenta de mi mirada y más aún de mis sonrojadas, y sonríe burlonamente, yo desvío la mirada y la fijo en Leo que está jugando.
"Me iré a vestir" Dice encaminándose a su habitación "incluso cuando sé que te encanta verme así" Añade antes de entrar en esta, y lo que provoca que mis mejillas tomen otro tono de rojo, más intenso que el anterior.
Luego de que se da una ducha, se viste, y cuando sale de su habitación, Leo corre hacia él, y abre los brazos para que lo tome. Les sonrío a los dos mientras me pongo de pie.
"ariba" dice dulcemente aun levantando los brazos en dirección de Erik y este sonríe antes de tomarlo en brazos besando su mejilla, la cual estaba igual de sonrojada que las mejillas de Erik.
"Vamos" me dice Durm.
Tomo el bolso con las cosas de Leo, porque siempre hay que estar preparada en caso de que cualquier cosa pase. Y después los tres salimos del edificio como una familia, Erik abre la puerta de su auto y sienta a Leo en su asiento, si el mismo que prácticamente me robó la primera vez que nos vimos, luego de que está seguro nos metemos dentro y maneja al McDonalds.
Una vez que se estaciona, saca a Leo de su silla, y yo lo sigo dentro del restaurante, Erik va a ordenar no sin antes preguntarme como 5 veces que era lo que Leo realmente comía, y que era lo que yo quería. Mientras el alemán ordenaba, Leo y yo fuimos en la búsqueda de una mesa.
Encontramos una en la parte de atrás del McDonalds, y esperamos a que Erik venga con la comida, no se demora más de 10 minutos y llega con dos bandejas con comida.
Se sienta junto a Leo y en frente de mi.
"Aquí tienen" Nos dice.
"Gracias" Le digo.
Le paso unas papas a Leo y lo dejo comer, Erik no aleja sus ojos del pequeño, y pienso que es el momento oportuno para contarle de mis planes de esta noche.
"Hoy dejaré que te quedes con Leo por la noche" Le digo, y éste inmediatamente gira la cabeza y fija su mirada en mí, puedo notar que está absolutamente sorprendido, pero también un poco asustado "SI quieres ser un padre tienes que hacerlo a tiempo completo, además es una noche, y una vez que se duerma no se despierta hasta la mañana". Le digo y me encojo de hombros "No es la gran cosa, darle un baño y llevarlo a la cama a las 9, creo que puedes con eso"
"No puedo" Me dice firmemente y yo cruzo los brazos "Tengo compromisos" Me dice y yo frunzo el ceño ahora.
"No creo que nada sea más importante que tu hijo, y la oportunidad de tenerlo por la noche. Ya está decidido Erik, puedes cambiar tus compromisos para otro día" le digo firmemente con las mejillas rojas.
Él suspira y mira a Leo, asintiendo levemente.
"Está bien y lo hago simplemente porque me voy el domingo" suspira nuevamente cuando dice eso.
Yo sonrío victoriosamente mirándolo, seguimos comiendo en silencio, y el alemán se nota que está un poco molesto conmigo, pero la verdad es que no me importaba en estos momentos, de hecho me gustaba la idea de arruinar sus planes.
Cuando terminamos de comer, nos vamos de vuelta a la casa de Erik en su auto, el camino va en absoluto silencio, lo único que se escucha es la radio, y a Leo nombrando un par de cosas que ve por el camino.
Una vez en el departamento de Erik le comienzo a dar las instrucciones de cómo cuidar a Leo y de cómo bañarlo, y cuando le digo que me tengo que ir parece que aún está lleno de preguntas. Y cuando creo que las he contestado todas, me cuesta demasiado decirle adiós a Leo, de hecho paso un buen rato abrazándolo y besando sus mejillas.
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Klein Durm // Erik Durm (TERMINADA)
FanfictionErik Durm es un gran futbolista alemán, completamente enfocado en su carrera como para tener distracciones. Tan concentrados que ni siquiera tiene idea de la existencia de su hijo