How to forgive and forget? (STEREK)

Capítulo 6: Only my world

En algún momento de mi vida, escuché que el amor cura todas las heridas del alma.

Que reconstruye ilusiones y repara errores.

Pero sabes, para mí el amor no existe.

Ahora yo

Encaro mis dudas, mis errores, pero veo que ya no hay nadie en quién creo

No quiero que me ayuden, que me quieran, no siento nada en mí.

Stiles Stilinski

Capítulo 6: Only my world

Los ojos whisky de Stiles visualizaron la recepción del hospital vacía, solo la recepcionista del horario de la madrugada se encontraba escribiendo seguramente algún registro en la computadora. Cuando ella lo vio lo saludó con cordialidad, pero el doctor Stilinski podía jurar que la mirada de esa mujer lo siguió observando hasta que él subió al ascensor que lo llevaría al quinto piso para poder cambiarse y así empezar su guardia.

Y realmente él no estaba tan equivocado en sus conjeturas, ya que cuando Stiles desapareció por el ascensor, la recepcionista tomó el teléfono y marcando un ya conocido anexo, dijo:

Doctor Lahey, el doctor Stilinski acaba de llegar.

La recepcionista alejó el auricular de su oreja en el instante cuando una exclamación: Ahora me va a escuchar, casi la deja sorda. La conversación se cortó y ella regresó su vista al ordenador donde en varias fotos de esa página de chismes de la farándula, el rostro del doctor Stilinski se dejaba ver, al lado de aquellos dos artistas, Theo Raeken y Derek Hale, este último cayendo al suelo, luego del fuerte puñetazo que el cardiólogo le había dado, como figuraba en las fotos anteriores.

Cuando Stiles llegó al piso quinto piso y estuvo a punto de salir del ascensor, tuvo que retroceder cuando un grito resonó frente a él haciéndolo respingar por el susto que se llevó.

— ¡Contigo quería hablar!

La mano de Isaac Lahey lo tomó uno de sus brazos para arrastrarlo fuera del ascensor y después de unos segundos, hizo que Stiles entrara al cuarto de descanso del piso, para mirarlo fijamente con una mueca algo ¿graciosa? en aquel rostro que se suponía debía mostrar molestia.

— ¿Qué sucede doctor Lahey? –

Preguntó el castaño dejando su mochila en una de las camas, para proceder a cambiarse. Se quitó aquel gorro de lana que llevaba puesto y otra exclamación, un grito en realidad de Isaac casi lo deja sordo.

— ¡No molestes! – acercándose hacia Stiles mirándolo fijamente – Acaso crees que cambiando el color de tú cabello, nadie – enfatizando más las palabras – absolutamente nadie te va a reconocer por las calles como aquel que le pegó a Black-Wolf Derek – mirándolo aprensivamente - ¡¿Cómo se te ocurrió hacer eso?! Y sobre todo.... ¡¿Por qué lo hiciste?!

—Yo creo que el color marrón le sienta bien.

Tanto Stiles como Isaac voltearon al escuchar aquella voz. El doctor Lahey sonrió ampliamente, olvidándose completamente de que estaba reclamándole a su colega el hecho de que el día anterior había golpeado a su ídolo, a esa persona que admiraba desde hacía muchos años.

Inconscientemente llevó una mano a su aún imperceptible vientre de tres meses, sintiendo que un par de lágrimas querían escapar de sus ojos, al ver en el umbral de la puerta de esa sala de descanso, a aquella persona que desde hacía ya casi un mes había estado lejos de ellos, por el congreso que había tenido que atender, al ser el director de la especialidad de Traumatología del Hospital Central de Los Ángeles.