Cap. 12: En la próxima vida

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Llegamos 5 minutos antes de lo que creiamos.

Apenas ingresamos, inspeccionamos el lugar para ver donde se encontraba Suho.

Luego de dar unas vueltas, choque con una mirada... Que al principio fue casual, como la que compartís con cualquiera que cruzas tus ojos en la calle, pero luego cambió totalmente.

Sus cejas expresaron sorpresa y sus ojos empezaron a brillar.

Se paró y cuando movió los brazos y la mitad de su cuerpo para adelante, se frenó de golpe y volvió a su lugar, puso sus brazos detrás de su espalda y su vista entristeció.

-¿Es él, Soo? -Pregunto Kai al ver que mi vista no dejaba la suya- Vamos, muévete y llega a él, tu puedes, no pasara nada, estoy contigo.

Tomo mis hombros y me guió todo el camino. Suho hizo una inclinación de respeto perfectamente, el hombre de al lado, ya entrado en edad hizo un venia, al igual que nosotros.

No pude dejar de verlo hasta que me senté y caí en cuenta que ya estábamos cara a cara.

-Hola, Kyungsoo -Dijo Suho en voz bajar- Tanto tiempo, te vez realmente guapo, espero que eso no te ofenda.

-No, no me ofende, Suho-

Sonrió y miro al piso sonrojado.
Este es el chico que hizo que pierda la movilidad de mi brazo, el que me denigro y maltrato... hoy ese chico, ese chico se avergonzó apenas le hable. Como la primara vez que hablamos en aquel convento.

-Antes que nada, los presento -Señalo al hombre de su lado- Él es mi médico, el doctor Lee Kang Woo. Doctor, esta persona enfrente nuestro es Kyungsoo y me imagino que su acompañante es su pareja.

-Kim Jongin, encantado de conocerlos a ambos -Se levanto Kai para saludar correctamente al igual que los demás, yo seguía estático-

-Hola Kyungsoo -Comento el doctor- creo que pasare a explicarte realmente porque estamos aquí.

Por lo que pude entender es que después de que paso un año en la correccional, lo enviaron a la cárcel a los 18 años. Allí su comportamiento no fue bueno y comenzaron los problemas y Suho recibió todo tipo de torturas y golpes en su estadía. Luego, se unió a la comunidad religiosa de la cárcel y comenzó a ir al psicólogo.

-A mis 20, cuando salí de la cárcel, no tenia donde ir, así que los familiares de mis compañeros de religión, me acogieron en sus casas y hasta me dieron trabajo. Iba a la iglesia todos los días, limpiaba, ayudaba con los volantes y hasta hacia trabajos para la comunidad.

-Luego de dos años en ese lugar, lo enviaron en una misión -Esta vez era el doctor que seguía el relato- Lo enviaron a un pueblo que era problemático, uno que necesitaba de su oración y trabajo comunitario y él acepto con todo gusto.

-Aunque allí no me hayan recibido como pensaba...-Suho comenzó a toser, pidió un minuto y prosiguió- Al principio fue fácil y sin problemas, hasta que una noche... la oración termino tarde y me quede para arreglar el lugar y demás.

-Si quieres, puedo proseguir Suho, por favor descansa -Dijo amablemente el doctor Lee. Suho afirmo suavemente, se ve que cogio un fuerte resfriado- Esa noche mi paciente fue abordado por uno de los drogadictos del pueblo, lo golpeo en la cabeza por detrás con un fierro.

-¿Qué? -Pregunte, fue lo único que pude dejar salir mientras mi vista volvió a ver a Suho, él solo miraba al piso-

-Si, luego lo drogo para poder robar lo recaudado, que iba a ser para poder comprar unas cosas para el templo. -Paro y lo mira a su paciente, como esperando su aprobación para seguir hablando, este solo asiento levemente- Lo encontró el pastor al otro día y lo llevo al hospital más cercano. Hicieron todo tipo de pruebas, le cocieron la cabeza y demás. Él se tenía que quedar 4 días para ver su progreso y esperar sus resultados. Yo fui siempre medico allí y sabia que en ese pueblo, tardaban en dar los resultados y más cuando hay una investigación policial.

¡Solo maltratame! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora