| Psycho |

Capítulo 15.

Noa.

Me desperté en la habitación de Amanda, tumbada en la cama. Me resultó bastante extraño encontrarme ahí, ya que yo recuerde me quedé dormida en el sofá. Me incorporé y me senté en él borde de la cama mientras intentaba desvelarme. Intenté tocarme el moratón, deseando que el dolor hubiera cuajado, y asi era, al tocarme por encima de la camiseta, mientras hacia una especie de masaje en círculos, no me dolía. Sonreí hacia mis adentros y me encamine al baño.

Me lavé la cara y me mire al espejo, tenia un pequeño moratón en mi mejilla, no tenia ni idea de donde y de que a podido producirse, pero no le di suma importancia ya que no me dolía.

-¿Caden? -pregunté al salir del baño. Le busque por el salón, la cocina y volvi a revisar la habitación, pero no habia rastro de el. Suspire frustrada y asustada ante la idea de que se hubiera ido allí, pero era más que imposible, Caden no era tonto, y sabía perfectamente que sí volvía allí se jugaria la vida, al igual que la mia. Decidí llamarlo pero antes de colocarme el movil en la oreja la puerta se abrió. Me gire y Caden entraba con una pequeña bolsa, empapado ya que estaba lloviendo a mares.

-Buenos dias, Noa. -dijo mientras dejaba la pequeña bolsa en la encimera de la cocina y se quitaba el abrigo, puso una mueca de dolor al quitarse las mangas, todavia no se le habrán curado del todo las heridas.

-Buenos dias. -respondi un poco confusa. -¿que has comprado?

-Em, pues no habia ni leche ni colacao, y he ido al super a comprarlo.

Asentí con la cabeza mientras me acercaba a el, estaba completamente empapado, y por desgracia los dos no teníamos ropa de repuesto.

-¿Tienes las llaves de casa? ¿De la tuya? -le pregunté a la vez que metía la leche en la nevera.

-Sí, ¿por qué? -pregunto poniéndose a mi lado ayudándome a ordenar un poco la cocina.

-Aparte de que no tenemos ropa de respuesto, estas empapado, no quiero que te pongas malo.

-Sabes que no nos quedaremos aqui eternamente, ¿no?

-Sí, sí lo se, pero por ahora no podemos llevar siempre la misma ropa.

Asintió con la cabeza y se volvió a colocar el abrigo. Frunci el ceño y me coloque en la puerta para que no pudiera pasar. No queria que fuera el, no queria que saliera a la calle en el tiempo en el que estabamos y menos como estaba el físicamente.

-Voy yo, dame las llaves. -dije extendiendo la mano para que me entregara las llaves de su casa.

Rió y se echó a un lado intentando buscar un hueco para pasar, pero me coloque rápidamente delante suya. Soltó un suspiro y me entregó las llaves a la vez que me entregaba su abrigo.

-No entiendo que tiene de malo que vaya yo, Noa yo sólo quiero pro-.

-Ahora me toca a mi. -dije mientras me colocaba su abrigo, el cual me quedaba exageradamente grande. Abrí la puerta y me despedí de el con la mano y la cerré delicadamente.

Salí del edificio y la lluvia cada vez era más fuerte, por suerte el edificio de Amanda no se encontraba muy lejos de lo que antes era mi "hogar".

Se perfectamente que la idea de intentar proteger a Caden de todo era imposible, ya que yo también necesitaba protegerme a mi misma. ¿Quién me dijo que acabaría asi? Lo mejor que podria hacer era desaparecer completamente, alejarme de Caden, ¿quién me dice a mi que yo no he tenido la culpa de todo esto? ¿De que los dos nos hallamos quedado sin nada? Pero no podía, no podía hacerlo, no podía dejarle sólo por diversos motivos los cuales me tienen comida la cabeza. ¿Por qué he tenido que enamorarme de el tontamente? ¿Por que me duele tanto la idea de alejarme de el? ¿De verdad soy capaz de hacer lo que sea sólo para mantenerlo a salvo? ¿Soy lo suficientemente valiente para hacerlo?