10. Aliento de cocodrilo.

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-¿En serio vas a ir así?- Hanna m observó por centésima vez.

-Sip-comí un poco de ajo.

-Beth te matará- se rió.

-Es mí cita, y mí cuerpo, no quiero más comentarios.-até mis cordones.

Hanna me miraba de arriba a abajo cada vez que yo me movía o caminaba. Creo que le llamaba la atención mis orejas de conejo o no lo se.

No quería verme atractiva ni verme llamativa así que me puse una playera vieja y unos pantalones con ponys. Elegí el mejor calzado, unas zapatillas que prendían luces y para agregar me pinté los labios de rosa chillón. Si. Parecía salida de una película para niños.

-Peinado listo-sujeté la trenza con una colita.

El timbre sonó y yo sonreí como foca (no pregunten) bajé corriendo y casi me tropiezo con un escalón, mejor dicho me caí y me di la cabeza contra la mesa y no sé una explicación lógica pero todo el labial violeta se dispersó por mi cara.

Abrí la puerta y por favor tenían que ver la cara de Peter al verme. Yo lo miré de arriba a abajo, no podía creerlo.

-¿Qué te ha pasado?-musitamos a mismo tiempo.

Estaba vestido de blanco, creo. No lograba ver el color de su camiseta ya que estaba cubierto de pintura. Llevaba unos pantalones cubiertos de pintura amarilla.

Amagamos en hablar, pero yo le cedí el espacio para que me cuente.

-Estaba pintando mi casa y luego se hizo tarde y no tuve tiempo de cambiarme- sonrió de una forma extraña, no parecía muy seguro.

-Mi hermana menor quería que juguemos a los disfraces y aquí estoy-sonreí falsamente.

-Sam no tienen hermanas-cruzó sus brazos.

-No que tu sepas-tosí- No quiero que pienses que me vestí así para no verme atractiva ni que tampoco comí ajo y cebollas para que no intentes besarme, si estás pensando eso. Estás totalmente equivocado.

-Vamos que se nos hace tarde.

***

-Señor, no entran vagabundos en este lugar- el recepcionista repitió

-¡Fijese bien! ¡Busque mi apellido por favor!-Peter gruñó

-No entraran de esta forma- el recepcionista con bigote nos miró de arriba a abajo.

-¡No somos vagabundos!, escuche,
Es día de sandiwch, cada jueves le doy a pato el pez un sandwich de mermelada. Y hoy no hay mermelada, y entonces mi hermana me dijo que le diera un sandwich de atún, no le puedo dar a pato atún.. ¿Tu sabes lo que es atún?
¡ES PEZ, SI PATO COME PEZ SERÍA UNA ABOMINACIÓN! Llegué tarde por ir a la tienda, por mermelada, porque solo había ese, ¡ese tonto atún!- Peter gruñó y suspiró muy ondo.-Ahora que le conté toda mi historia, debemos pasar- Peter intento abrir la puerta pero el recepcionista se puso frente a él.

El recepcionista lo miraba con la boca abierta- Primero: Señor, es viernes y segundo ¡Llamen a la policía!

Yo me reía cada vez más fuerte, pero todo acabó cuando dos guardias nos agarraron a Peter y a mi para llevarnos a una patrulla.

-¡No! ¡No! Quiero un abogado- Peter pataleaba.- y tu maldito bigote de Mario Bross YA VERÁS, SÓLO ESPERA MI VENDETA.

Uno de los policías me miró y yo levanté mis manos mostrando que no iba a intentar nada.

***

-Están en graves problemas jovencitos- la policía Jones, Jomes, algo con "J" era. Nos dijo que esperemos en una celda hasta que revisen nuestro expediente.

Yo no había dicho nada en todo el camino, sentía furia en mi cuerpo. En cualquier momento le iba a dar una bofetada a Peter. Mis padres me iban a matar, ya imaginaba en mi mente mi nombre en los títulos de los diarios.

Peter se sentó a un costado de la celda y cruzó sus piernas. Revolvió algo en su bolsillo y sacó una armónica.

Comenzó a tocar una melodía que solo el entendía. Yo lo miré y le sonreí.-Hey, Peter.-me acerqué y coloqué una pierna a cada costado de el para después sentarme en sus piernas.

-Hay algo que quiero decirte hace mucho tiempo- susurré a su oído. Sentí como el se ponía nervioso. -Esta fue la mejor cita que has tenido ¿cierto?- el también susurró en mi oreja.

-Por su puesto -tomé su mentón para que pudiera mirarme - y está es la mejor cachetada que te pudieron haber dado ¡Maldito cabrón!- le pegué una bofetada que hizo que mi mano doliera.

-¡Zorra! ¡Ese era mi perfil favorito!- agarró mis muñecas y yo no pude moverme -¡Sueltame estúpido! -intenté safarme pero era imposible.

Acercó sus labios a los míos, yo automáticamente o gracias al señor que controla todos desde arriba, bostecé con mi aliento de fragancia perfumada.

El me soltó y comenzó a toser —¿Qué carajo comiste maldita desgraciada?

—Meh, lo de siempre, dos ajos, cinco cebollas, tú sabes — fruncí los hombros.

—Lo único que sé es que eso es como la bomba atómica, parecía a aliento de cocodrilo —puso una muesca de asco.

Sentimos que alguien abría la cerradura de la celda, giramos y vimos a la oficial.

-Pueden salir- la oficial de policía abrió la celda y nos dejó salir.

—¿En serio? Genial—me puse de pie y salí casi corriendo de ese lugar horrible.

***

Era tarde, no me había dado cuenta que habíamos estado tres horas en esa celda. Con Peter nos mirábamos, estábamos lejos de casa y sin nada de dinero.

-¡Mira una bicicleta!- Peter se acercó a un jardín de una casa.

-Peter es de niña, mejor vamos caminando.

-Aprendí a andar en la de Alison, vamos Sam.

-¡No! La dueña es una niña pequeña ¿no te da lástima? -me crucé de brazos.

-¡Sam! Tiene telarañas, seguro esa niña ya está en la universidad ¡Vamonos!- se subió y llegó a mi lado.

-No me vas a hacer subir ni porque me dieras todo el oro del mundo.

***

-¡Peter! No vayas tan rápido que me agarran náuseas.

-Quiero llegar antes de las once para poder ver mi serie ¡Vomita si quieres!

-Te odio.-me aferré mas a el.

-El sentimiento es mutuo.

Cuando llegamos a mi casa el se bajo y me acompañó hasta la puerta. -Gracias por traerme -musité y abrí la puerta.

-Sam, antes que te vayas quería preguntarte algo.-me tomó del brazo.

Por mi mente vagaban partes clichés de películas y de libros, yo no quería ninguna relación seria y menos con éste chico. Peter me resultaba lindo, si. Pero para ¿Tener una relación? No, claro que no.

-Claro, Pet- intenté no parecer nerviosa.

El suspiró-Quieres... Ser... Mi...-me estaba mordiendo las manos, como le iba a decir que no-¿Mejor amiga?-terminó la frase.

Una sonrisa apareció por mi cara, no lo podía creer, solté un suspiro de alivio -¡Claro!

Nota de la autora:

Hola linduras, disfruten este cap!

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⏰ Última actualización: Jul 04, 2016 ⏰

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